ESTUDIO BÍBLICO, DERRIBANDO ARGUMENTOS QUE NOS ALEJAN DE DIOS Y DE SU IGLESIA III PARTE
TEXTO: TEXTO: 2 CORINTIOS 10:4-5 porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, 5 derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,
Hoy continuamos reflexionando sobre aquellos argumentos que muchas personas utilizan para mantenerse alejados de Dios y de su iglesia y estamos estudiando cuáles son las respuestas Bíblicas que derriban todos esos argumentos equivocados.
Este día vamos a reflexionar sobre algunos ARGUMENTOS QUE LAS PERSONAS UTILIZAN PARA RECHAZAR LA SALVACIÓN DEL SEÑOR PARA SUS VIDAS.
VEAMOS CUALES SON ESOS ARGUMENTOS Y VEAMOS LA RESPUESTA QUE NOS DA LA PALABRA DE DIOS:
I) PRIMER ARGUMENTO: SIENTO QUE TODAVÍA NO ESTOY PREPARADO PARA ACEPTAR A JESÚS COMO MI SALVADOR
Muchas personas no quieren acercarse a Dios y rechazan la salvación porque sienten que aún no están listas, que aún no están preparadas, pues piensan que tienen que arreglar cosas de su vida primero, que hay cosas en su vida que primero tienen que poner en orden.
La palabra de Dios nos muestra que este argumento no tiene fundamento, no es un argumento válido para no recibir la salvación del Señor para nuestra vida pues:
A) LA SALVACIÓN ES UN REGALO DE DIOS, NO TIENES QUE ESTAR PREPARADO PARA RECIBIRLO (EFESIOS 2:8-9) Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9 no por obras, para que nadie se gloríe.
B) DIOS NO QUIERE QUE ARREGLES NADA DE TU VIDA PRIMERO, LO PRIMERO Y URGENTE ES BUSCARLO Y LUEGO EL SE ENCARGARÁ DE LIMPIAR Y RESTAURAR LO QUE SEA NECESARIO EN TU VIDA (ISAÍAS 1:18) Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.
C) ASÍ COMO ESTAS TIENES QUE VENIR A JESÚS CON LA PLENA CONFIANZA QUE ÉL NO TE VA A RECHAZAR (JUAN 6:37) Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
II) SEGUNDO ARGUMENTO: DIOS NOS AMA Y ES DEMASIADO BUENO COMO PARA CONDENAR A ALGUIEN EN EL INFIERNO.
Este verdaderamente es un argumento que muchas personas creen que es verdadero, pues satanás siempre se encarga de presentarnos VERDADES A MEDIAS para engañarnos y hacernos tropezar.
Este argumento queda derribado cuando comprendemos que eso SOLAMENTE ES UNA VERDAD A MEDIAS pues si bien es completamente cierto que DIOS ES AMOR Y LLENO DE BONDAD, no podemos dejar de lado que también DIOS ES JUSTO Y NO TENDRÁ POR INOCENTE AL CULPABLE (Números 14:18) Jehová, tardo para la ira y grande en misericordia, que perdona la iniquidad y la rebelión, aunque de ningún modo tendrá por inocente al culpable; que visita la maldad de los padres sobre los hijos hasta los terceros y hasta los cuartos.
DIOS ES BUENO y la Biblia enseña que DIOS NO DESEA QUE NADIE PEREZCA, SINO QUE TODOS SE ARREPIENTAN Y ENCUENTREN VIDA ETERNA (2 Pedro 3:9) El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.
PERO LA JUSTICIA DE DIOS TAMBIÉN REQUIERE QUE EL PECADO SEA CASTIGADO. Dios demostró su amor enviando a su Hijo Jesucristo para pagar el precio por nuestros pecados en la cruz, ofreciéndonos la salvación como un regalo gratuito. AQUELLOS QUE RECHAZAN ESTE REGALO ENFRENTAN LA CONSECUENCIA DE SU PECADO, QUE ES LA SEPARACIÓN ETERNA DE DIOS (Romanos 6:23). Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
DIOS ES BUENO, PERO SU AMOR Y SU BONDAD NO INVALIDAN SU JUSTICIA
DIOS YA HIZO JUICIO SOBRE LOS ÁNGELES QUE PECARON (2 PEDRO 2:4) Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al juicio;
DIOS YA DERRAMÓ JUICIOS SOBRE LOS PECADORES EN LA ANTIGÜEDAD (2 PEDRO 2:5-6) y si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos; 6 y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impíamente,
NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO DEJÓ BIEN CLARO QUE DIOS TIENE PODER PARA CONDENAR A LOS PECADORES AL INFIERNO ETERNO (LUCAS 12:4-5) Mas os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. 5 Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a este temed.
III) TERCER ARGUMENTO: SOY UNA BUENA PERSONA NO VEO PORQUE NECESITO RECIBIR LA SALVACIÓN SI NO HE HECHO NADA TAN MALO.
Muchos se consideran tan buenas personas que piensan que no necesitan recibir la salvación pues por ser buenos y no haber cometido grandes pecados no merecerían ser condenados, son personas como lo dice la palabra de Dios: LIMPIAS EN SU PROPIA OPINIÓN (Proverbios 30:12) Hay generación limpia en su propia opinión, Si bien no se ha limpiado de su inmundicia.
Este argumento queda derribado cuando comprendemos que:
La palabra de Dios nos enseña que a pesar de lo que nosotros podamos decir de nosotros mismos, pero NO HAY JUSTO NI AUN UNO (Romanos 3:10) Como está escrito: No hay justo, ni aun uno;
La palabra de Dios nos demuestra que si no hay ni un justo eso significa que TODOS SOMOS PECADORES y EL VEREDICTO por el pecado que hay en nosotro es de CONDENACIÓN (Romanos 3:23) por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,
Muchas personas se consideran muy buenas o consideran que no han cometido grandes pecados porque se comparan con otras personas, se comparan con otros pecadores como el fariseo de la parábola de nuestro Señor Jesucristo (Lucas 18:11-12) El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; 12 ayuno dos veces a la semana, doy diezmos de todo lo que gano.
Pero al compararnos con la santidad y la pureza de nuestro Dios podemos darnos cuenta que somos pecadores, que hay grandes impurezas en nuestra vida, y que necesitamos ser limpiados y salvados por medio de Jesucristo (1 Samuel 2:2) No hay santo como Jehová; Porque no hay ninguno fuera de ti, Y no hay refugio como el Dios nuestro.
