DIA DE LAS MADRES 2025: ¿MADRES LUCHONAS O MUJERES VIRTUOSAS?

TEMA: ¿MADRES LUCHONAS O MUJERES VIRTUOSAS?

TEXTO: PROVERBIOS 31:10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas.

PROVERBIOS 31:28-30 Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba: 29 Muchas mujeres hicieron el bien; Mas tú sobrepasas a todas. 30 Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, esa será alabada.

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En nuestra cultura actual latinoamericana se reconoce mucho la figura de la «MUJER LUCHONA»: es decir, esa mujer fuerte, muchas veces madre soltera, que trabaja, que no se rinde, que saca adelante a sus hijos con esfuerzo y valentía. Y sin duda, muchas mujeres se han ganado el respeto de sus hijos y de la sociedad por todo lo que han tenido que enfrentar y superar para sacar adelante a su familia.

Pero hoy con mucho respeto y amor en el Señor quiero hacerte una pregunta: ¿Será suficiente ser una mujer luchona? ¿Será eso todo lo que Dios espera de una mujer? La Biblia nos habla de algo superior, más completo, más transformador: NO SOLAMENTE SER UNA MADRE LUCHONA SINO LLEGAR A SER UNA MUJER VIRTUOSA.

Pero ¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE UNA MUJER LUCHONA Y UNA MUJER VIRTUOSA? 

La mujer luchona lucha con sus fuerzas, La mujer virtuosa lucha con las fuerzas que vienen de Dios por medio de la fe.

La mujer luchona se levanta y pelea por necesidad, La mujer virtuosa se levanta porque ha encontrado el propósito de Dios en su vida.

La mujer luchona se esfuerza y hace lo que sea necesario para sobrevivir. La mujer virtuosa busca primeramente agradar a Dios en todo lo que hace.

La mujer luchona  con sus acciones quiere demostrar su valor al mundo. La mujer virtuosa vive sabiendo que su valor viene de Dios.

VEAMOS LO QUE NOS ENSEÑA LA PALABRA DE DIOS PARA QUE ESTE DIA DE LAS MADRES PUEDAS COMPRENDER DE QUÉ MANERA PUEDES LLEGAR A SER UNA MUJER VIRTUOSA QUE AGRADA A DIOS.

I) UNA MAMA LUCHONA DEPENDE DE SUS FUERZAS; LA MUJER VIRTUOSA DEPENDE DE DIOS

(2 Timoteo 1:5) trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.

Muchas mujeres luchonas viven cansadas, llenas de amargura y de cargas en sus corazones porque todo lo hacen en sus fuerzas, en su propia capacidad.

Pero la mujer virtuosa tiene su fe y su esperanza puesta en Dios, depende del poder y la fuerza del Señor, confía en sus promesas y DESCANSA EN SU FIDELIDAD (Hebreos 11:11) Por la fe también la misma Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir; y dio a luz aun fuera del tiempo de la edad, porque creyó que era fiel quien lo había prometido.

Hoy es un buen dia para responder esta pregunta: ¿Mamá, estás luchando tu sola? ¿Estás intentando salir adelante con todo sin buscar la ayuda del Señor?

Hoy el Señor te invita a no solamente ser una mujer que lucha, sino a ser una mujer de Fe que pelea la batalla de la fe confiando el poder y la fuerza de nuestro Dios (Filipenses 4:19) Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.

II) UNA MAMÁ LUCHONA BUSCA DEMOSTRARLE A OTROS DE LO QUE ELLA ES CAPAZ, LA MUJER VIRTUOSA BUSCA PRIMERAMENTE AGRADAR A DIOS CON LO QUE HACE

(PROVERBIOS 31:28-29) Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; y su marido también la alaba: Muchas mujeres hicieron el bien; mas tú sobrepasas a todas.

Podemos darnos cuenta en la sociedad que muchas mujeres luchan y se esfuerzan en todo lo que hacen para demostrarle algo a otros: A sus padres, a su pareja, a la sociedad, etc.

Esas mujeres quieren dejar en claro que HAN HECHO LO QUE SEA NECESARIO para poder llegar donde han llegado, para tener lo que tiene, y para sacar adelante a sus hijos, aunque muchas veces eso haya sido algo que no agrada a Dios.

Pero la mujer virtuosa procura primeramente agradar a Dios, y por eso recibe el reconocimiento que realmente vale: El de su familia y el del Señor.

III) UNA MAMÁ LUCHONA SACA FUERZAS DEL DOLOR; LA MUJER VIRTUOSA PERMITE QUE DIOS SANE SU CORAZÓN Y SE FORTALECE EN DIOS

(PROVERBIOS 31:25) Fuerza y honor son su vestidura; y se ríe de lo por venir.

La historia de muchas madres se puede comparar a la del “Ave Fénix”, es decir, se han tenido que levantar de las cenizas, por el abandono, por él dolor, por el maltrato, etc.

Posiblemente lo que más le ha motivado a levantarse, a luchar, y a esforzarse ha sido el dolor que ha vivido.

Es por eso que el corazón de las madres luchonas muchas veces se ha endurecido por las heridas, y aunque por fuera aparenta ser una mujer fuerte, en su interior su corazón está quebrantado.

En cambio una mujer virtuosa también ha sufrido, también ha experimentado el dolor, también ha experimentado el abandono, pero ella HA PERMITIDO QUE EL SEÑOR SANE SU CORAZÓN (Jeremías 30:17) Mas yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová; porque desechada te llamaron, diciendo: Esta es Sion, de la que nadie se acuerda.

Una mujer virtuosa se vuelve fuerte en el Señor, su corazón tiene paz porque confía, se ríe del futuro porque SABE QUE DIOS ESTÁ CON ELLA.

CONCLUSIÓN: Ser una mujer luchona es admirable, pero ser una mujer virtuosa es glorioso. Dios no te llama solo a sobrevivir, Él te llama a florecer en medio de la dificultad, a ser luz, a reflejar a Cristo en tu vida.

LLAMADO: Si hoy reconoces que has vivido en tus fuerzas, luchando sola, sin dirección, sin paz… hoy es el día para entregar tu corazón al Señor.

Hoy puedes decirle: «Señor, haz de mí una mujer virtuosa. Enséñame a depender de Ti, a agradarte a Ti, a caminar por fe y no motivada por mis heridas. quiero que hoy sanes mi corazón por medio de tu amor.