ESTUDIO BÍBLICO, LOS SIETE “YO SOY” DE JESÚS EN EL EVANGELIO DE JUAN I PARTE.
TEXTO: JUAN 20:30-31 Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. 31 Pero estas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.
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Este día comenzamos una nueva serie de estudios Bíblicos, en la cual vamos a estudiar las afirmaciones que Jesús hizo sobre sí mismo, las cuales encontramos en el evangelio de Juan.
Tenemos que saber que el evangelio de Juan tiene un objetivo bien definido: MOSTRAR LA NATURALEZA DIVINA DE JESÚS, Y SU RELACIÓN ÚNICA CON EL PADRE CELESTIAL.
Es decir, el evangelio de Juan tiene como objetivo demostrar QUE JESÚS ES DIOS.
Es por eso como lo dicen los versículos que le leímos para comenzar nuestro Señor Jesucristo hizo muchas señales, pero las que están escritas en el evangelio de Juan se escribieron para que creamos que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y que por la fe tengamos vida en su nombre.
En el evangelio de Juan encontramos SIETE SEÑALES de Jesús.
ESTAS SIETE SEÑALES SON:
1. Jesús convierte el agua en vino
2. Jesús sana al hijo de un noble
3. Jesús sana a un paralítico
4. Alimentación de los cinco mil
5. Jesús camina sobre las aguas.
6. Jesús sana a un ciego de nacimiento
7. Resurrección de Lázaro
Pero podemos ver también en el evangelio de Juan que aparte de las siete señales, nuestro Señor Jesucristo también dio enseñanzas e hizo afirmaciones que nos muestran su NATURALEZA DIVINA, a estas afirmaciones que hizo nuestro Señor Jesucristo se les llama LOS SIETE “YO SOY” DE JESÚS EN EL EVANGELIO DE JUAN.
1 “Yo soy el pan de vida”
2 “Yo soy la luz del mundo”
3 “Yo soy la puerta”
4 “Yo soy el buen pastor”
5 “Yo soy la resurrección y la vida”
6 “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida”
7 “Yo soy la vid verdadera”
En este estudio que hoy comenzamos vamos a reflexionar sobre cada una de esas SIETE AFIRMACIONES, que nos van a permitir comprender de una mejor manera la naturaleza divina de Jesús y la necesidad que tiene todo ser humano de confesar a Jesús como Señor y salvador de su vida y desarrollar una relación personal con él .
PARA COMENZAR HABLEMOS PRIMERAMENTE DE LA FRASE USADA POR NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO: “YO SOY”
Como lo dijimos para comenzar el evangelio de Juan tiene por objetivo mostrar la naturaleza divina de Jesus, y tenemos que comprender que cuando usó la frase “Yo soy” JESÚS ESTABA EXPRESANDO DIRECTAMENTE SU NATURALEZA DIVINA.
Para ver la conexión de la frase “Yo soy” con la divinidad tenemos que recordar la manera como Dios se presentó a Moises cuando lo llamó para liberar a su pueblo de Egipto
(Exodo 3:13-15) Dijo Moisés a Dios: He aquí que llego yo a los hijos de Israel, y les digo: El Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé? 14 Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros. 15 Además dijo Dios a Moisés: Así dirás a los hijos de Israel: Jehová,[a] el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi nombre para siempre; con él se me recordará por todos los siglos.
El nombre YO SOY significa su ETERNIDAD, el es, nunca ha dejado de ser, no ha sido creado, no tiene principio ni fin, significa su AUTO EXISTENCIA él es, no necesita de nada ni de nadie más para existir, y también significa su AUTOSUFICIENCIA él es y en él está todo lo que el universo necesita, todo lo que su creación necesita,.
Los judios comprendía a que se refería Jesus cuando él decía la frase “Yo soy”, comprendían que estaba haciendo referencia a ser igual a Dios, a tener la misma naturaleza divina que el Padre Celestial, por eso intentaron apedrearlo cuando uso esa frase
(Juan 8:58-59) esús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy. 59 Tomaron entonces piedras para arrojárselas; pero Jesús se escondió y salió del templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue.
Y podemos ver que cuando llegaron los judios con los soldados para capturarlo y llevarlo para ser crucificado, cuando preguntaron quién era Jesús y él les dijo: YO SOY, todos cayeron a tierra, por el poder, no solo del nombre de Dios, sino por el poder y autoridad de Dios hecho hombre, quien estaba frente a ellos
(Juan 18:5-6) Le respondieron: A Jesús nazareno. Jesús les dijo: Yo soy. Y estaba también con ellos Judas, el que le entregaba. 6 Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron, y cayeron a tierra.
Podemos ver que cuando Juan recibió la revelación de nuestro Señor Jesucristo sobre los eventos futuros para la historia de la humanidad en la isla de Patmos, el mismo Señor Jesucristo nuevamente usó la AFIRMACIÓN “YO SOY” para dejar claro que la revelación que Juan iba a escribir era verdadera, pues era revelada por alguien que es eterno y conoce el porvenir
(Apocalipsis 1:9-13) Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo. 10 Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta, 11 que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea.
El apostol Juan en esa Isla pudo contemplar la DIVINIDAD DE JESÚS, pudo reconocer que verdaderamente nuestro Señor Jesucristo es el YO SOY del Antiguo Testamento
(Apocalipsis 1:12-17) Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo; y vuelto, vi siete candeleros de oro, 13 y en medio de los siete candeleros, a uno semejante al Hijo del Hombre, vestido de una ropa que llegaba hasta los pies, y ceñido por el pecho con un cinto de oro. 14 Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego; 15 y sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno; y su voz como estruendo de muchas aguas. 16 Tenía en su diestra siete estrellas; de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.17 Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; YO SOY el primero y el último; 18 y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
Para cada uno de nosotros Jesús es nuestro GRAN YO SOY,
En nuestra enfermedad él nos dice YO SOY TU SANADOR
En nuestra escasez y necesidad él nos dice YO SOY TU PROVEEDOR
Y cuando llegue el tiempo final de nuestra vida, él nos dirá YO SOY TU SALVADOR.
En el próximo estudio vamos a reflexionar sobre el primero de los YO SOY DE JESÚS EN EL EVANGELIO DE JUAN: “YO SOY EL PAN DE VIDA”
