REFLEXIONES PARA PADRES E HIJOS

TEMA: REFLEXIONES PARA PADRES E HIJOS

TEXTO: HECHOS 20:22-27 Ahora, he aquí, ligado yo en espíritu, voy a Jerusalén, sin saber lo que allá me ha de acontecer; 23 salvo que el Espíritu Santo por todas las ciudades me da testimonio, diciendo que me esperan prisiones y tribulaciones. 24 Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios. 25 Y ahora, he aquí, yo sé que ninguno de todos vosotros, entre quienes he pasado predicando el reino de Dios, verá más mi rostro. 26 Por tanto, yo os protesto en el día de hoy, que estoy limpio de la sangre de todos; 27 porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios.

DESCARGA EN PDF: https://elblogdelpastoroscarflores.com/wp-content/uploads/2022/10/REFLEXIONES-PARA-PADRES-E-HIJOS.pdf

Este texto nos muestra el momento en el cual el apóstol Pablo se estaba despidiendo de los hermanos que se encontraban en Efeso y en MIleto ya que él iba rumbo a Jerusalén y posiblemente como se los dijo Pablo, esa seria la ultima vez que verían su rostro, es decir que esas palabras eran prácticamente de una despedida final para ellos.

En esa despedida Pablo les hace ver todo lo que él ha procurado hacer por ellos, y de cómo él ha procurado cumplir para ellos el ministerio que nuestro Dios le había encomendado.

Esas palabras del apóstol Pablo también nos pueden servir para hacernos reflexionar sobre nuestra labor de Padres, y la forma como hemos cumplido el primer ministerio que nuestro Dios nos ha encomendado, es decir, nuestros hijos, nuestra familia.

VEAMOS QUÉ REFLEXIONES PODEMOS TOMAR PARA PADRES E HIJOS CRISTIANOS POR MEDIO DE LAS PALABRAS DE DESPEDIDA DEL APÓSTOL PABLO:

I) A PESAR DE LAS DIFICULTADES NUESTRA VIDA COMO PADRES CRISTIANOS HA SIDO PRECIOSA PARA DIOS EN BENEFICIO DE NUESTROS HIJOS (VS 22-24A) Ahora, he aquí, ligado yo en espíritu, voy a Jerusalén, sin saber lo que allá me ha de acontecer; 23 salvo que el Espíritu Santo por todas las ciudades me da testimonio, diciendo que me esperan prisiones y tribulaciones. 24 Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo,

Como padres y madres de familia cristianos podemos reconocer que nuestra vida no ha sido fácil, hemos pasado tribulaciones, dificultades, pruebas, enfermedades, angustias, posiblemente tu vida ha sido dura, como madre sacando adelante a tus hijos  tu sola.

Pero que verdaderamente las palabras que expresa el apóstol Pablo son reales en la vida, de muchos padres y madres de familia pues a pesar de las dificultades que les ha tocado vivir, pero SU VIDA HA SIDO PRECIOSA PARA SUS HIJOS (Preciosa: De mucho valor) ya que por medio de su vida nuestros Dios ha provisto alimento para sus hijos, les ha provisto estudios, educación, ropa, cuidados médicos, protección, disciplina, etc.

Aunque quizás nadie lo reconozca pero la vida de los padres y madres cristianas es una vida preciosa para Dios, de gran valor,  pues ha sido útil para cumplir sus propósitos en la vida de sus hijos y de su familia, para hacer llegar la bendición y la provisión a sus hogares.

II) NO HAY MAYOR SATISFACCIÓN PARA UN PADRE O UNA MADRE CRISTIANA QUE TERMINAR SU VIDA CON EL GOZO DE HABER CUMPLIDO EL MINISTERIO QUE NUESTRO DIOS LE ENCARGÓ ( VS 25B) con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.

A todos aquellos que tenemos el privilegio y la bendición de ser padres y madres el Señor nos ha encomendado un ministerio: LA VIDA DE NUESTROS HIJOS, esas son las principales ovejas de nuestro rebaño, y así como los pastores darán cuenta de las ovejas que Dios les encomendó,  también los padres darán cuenta de esas ovejas que Dios les encomendó cuidar, las cuales son sus hijos e hijas (Hebreos 13:17) Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso.

Lastimosamente muchos padres y madres de familia no terminan su ministerio con gozo, sino con tristeza, con frustración, por no haber cuidado a sus hijos e hijas, por no haber estado con ellos cuando los necesitaban, por no haberlos aconsejado, por no haberlos disciplinado cuando era necesario, por no haber luchado por ellos cuando se estaban apartando del camino del Señor, por no haberse ocupado de su espiritualidad y ni siquiera haberlos llevado a la iglesia.

Como hijos e hijas posiblemente tus padres no pudieron darte TODO LO QUE QUERÍAS, pero tienes que sentirte agradecido con ellos porque te dieron TODO LO QUE PUDIERON, y lo más valioso que te dieron fue SU TIEMPO, SUS CONSEJOS, SU AMOR, SUS CUIDADOS, Y EL ESTAR CONTIGO EN LAS BUENAS Y EN LAS MALAS.

Y si posiblemente en tu vida no tuviste unos padres que estuvieran contigo, que te apoyaran y que te dieran su amor, recuerda que AHORA TIENES EL MEJOR DE TODOS LOS PADRES: ¡¡NUESTRO DIOS!! (Salmos 27:10) Aunque mi padre y mi madre me dejaran, Con todo, Jehová me recogerá.

III) COMO PADRES Y MADRES CRISTIANOS SOMOS LOS PRIMEROS RESPONSABLES DE QUE NUESTROS HIJOS RECONOZCAN A JESÚS COMO SEÑOR Y SALVADOR DE SUS VIDAS (HECHOS 20:26-27) Por tanto, yo os protesto en el día de hoy, que estoy limpio de la sangre de todos; 27 porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios.

El apóstol Pablo les dijo en su despedida que él estaba limpio de la sangre de todos los que estaban con él ese día, pues a todos él les había predicado la palabra de Dios, a todos les había anunciado el evangelio.

Esa es nuestra responsabilidad como padres y madres cristianos, tenemos que hablarles a nuestros hijos del evangelio de nuestro Señor Jesucristo, tenemos que asegurarnos que ellos conozcan al Señor, no solamente traerlos a la iglesia, sino que también nosotros debemos de tomarnos el tiempo de confirmar su salvación, de asegurarnos que los hijos e hijas que Dios nos dio, también son hijos de Dios por medio de Jesucristo.

No hay mayor satisfacción para un padre o una madre cristianos que poder decir las palabra de nuestro Señor Jesucristo al hablar de sus hijos, y  la mejor manera de hablarles de Cristo a nuestros hijos mayores no es solamente con la Biblia, sino también con nuestro testimonio, con el cambio que Dios ha obrado en nosotros, para que ninguno se pierda por causa nuestra (Juan 18:9) para que se cumpliese aquello que había dicho: De los que me diste, no perdí ninguno.

Como padres y madres cristianos no debemos cansarnos de predicar a nuestros hijos e hijas, no nos debemos cansar de orar por su salvación ni de hablarles de Jesús y la salvación que solamente él puede darnos (2 Timoteo 4:2) que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.

IV) UNA REFLEXIÓN FINAL PARA HIJOS E HIJAS: NO OLVIDES LAS LÁGRIMAS DE TUS PADRES (HECHOS 20:31) Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno.

No olvides las lágrimas de esa madre que oraba y lloraba todos los días para que volvieras al camino de Dios.

No olvides las lágrimas de tus padres cuando te aconsejaban y suplicaban que no cayeras en ese vicio en el que hoy estás enredado.

No olvides las lágrimas de esa madre que te aconsejo que cuando ella ya no estuviera los hermanos no se pelearan por las cosas materiales, sino que se perdonaran.

NO OLVIDES LAS LÁGRIMAS DE TUS PADRES Y COMPRENDE QUE NO HAY MAYOR ALEGRÍA PARA UN PADRE Y UNA MADRE CRISTIANA QUE VER A SUS HIJOS EN EL CAMINO DEL SEÑOR (3 JUAN VS 4) No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad.

Deja un comentario