PURGUEMOS NUESTRO CORAZÓN

TEMA: PURGUEMOS NUESTRO CORAZÓN

TEXTO MATEO 5:8 Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.

DESCARGA EN PDF: https://elblogdelpastoroscarflores.com/wp-content/uploads/2023/11/PURGUEMOS-NUESTRO-CORAZON.pdf

Posiblemente nos puede parecer un poco extraño el título de este mensaje, pero para poder comprender porque necesitamos purgar nuestro corazón tenemos que saber que :

LA PALABRA  PURGAR SIGNIFICA DOS COSAS MUY IMPORTANTES:

Quitar de una cosa lo malo, peligroso o dañino y limpiar, purificar algo, quitándole lo innecesario, inconveniente o superfluo.

Verdaderamente tenemos que reconocer con sinceridad que muchas de esas palabras que encontramos en estas definiciones están presentes en nuestro corazón,  hay cosas dañinas, peligrosas , malas , innecesarias e inconvenientes.

Cosas como por ejemplo el rencor , la envidia , el odio , los deseos impuros , los deseos de venganza,  los adulterios , las fornicaciones, etc.

Y COMO CRISTIANOS TENEMOS QUE COMPRENDER QUE TODO LO MALO Y DAÑINO QUE HAY EN NUESTRO CORAZÓN AFECTA GRANDEMENTE NUESTRA VIDA:

PRIMERAMENTE: Nos afecta para poder experimentar en nuestra vida él poder y las maravillas del Señor (Isaías 59:1-2) He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír; pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír.

SEGUNDO: Nos afecta pues lo que hay en nuestro corazón se refleja directamente en nuestra vida, en nuestras acciones,  en nuestras actitudes y en nuestras decisiones (Proverbios 4:23) Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.

ENTONCES ¿QUE NECESITAMOS PARA PURGAR NUESTRO CORAZÓN? que necesitamos hacer para sacar de nuestro corazón todas aquellas cosas dañinas que afectan nuestra vida y que son desagradable a nuestro Dios.

VEAMOS LO QUE NOS ENSEÑA LA PALABRA DE DIOS

I) NECESITAMOS RECONOCER Y CONFESAR NUESTROS PECADOS

(Salmos 51:3) Porque yo reconozco mis rebeliones,Y mi pecado está siempre delante de mí. / (Salmos 32:5) Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad.Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová;Y tú perdonaste la maldad de mi pecado.

No podemos limpiar algo que no reconocemos que está sucio , muchas veces las personas se dan cuenta de nuestros pecados y errores pero nosotros no queremos reconocerlos.

Si queremos que nuestro Dios limpie nuestro corazón tenemos que reconocer y confesar nuestro pecado con sinceridad, confesar nuestro pecado significa exponer nuestro pecado delante de la luz del Señor, es abrir las cámaras secretas de nuestro corazón a la mirada del Señor.

Confesar significa hablar con Dios de algo que él ya conoce de nuestra vida pero que hemos tratado de mantener oculto.

II) NECESITAMOS ARREPENTIRNOS DE LOS PECADOS QUE HEMOS GUARDADO EN NUESTRO CORAZÓN 

(Hechos 3:19) Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio,

Si reconocemos nuestro pecado y de verdad queremos cambiar, si de verdad queremos agradar a Dios, tenemos que arrepentirnos de verdad de esos pecados que hemos guardado en nuestro corazón.

Pero tenemos que comprender que arrepentimiento no es hacer promesas, arrepentimiento no es mostrar tristeza externa, no es solamente remordimiento, arrepentimiento significa un corazón quebrantado y humillado ante Dios por causa de nuestro pecado, es un dolor verdadero por fallarle al Señor, es el deseo sincero de no volver a fallarle, el deseo sincero de no volver atrás (Salmo 51:16-17) Porque no quieres sacrificio, que yo lo daría; No quieres holocausto. 17 Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.

Si estamos de verdad arrepentidos vamos a sacar de nuestro corazón todo aquello que no le agrada al Señor, y vamos a llenar nuestro corazón de su palabra, de su presencia, de su amor (Job 22:21) Vuelve ahora en amistad con él, y tendrás paz; Y por ello te vendrá bien.

III) NECESITAMOS EXPERIMENTAR EL PERDÓN DE DIOS Y PERDONAR A LOS QUE NOS HAN OFENDIDO

(Marcos 11:25) Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.

La confesión y el arrepentimiento nos permiten experimentar el perdón de nuestro Dios, somos perdonados por todo aquello que guardamos en nuestro corazón y que desagrada al Señor.

Pero hay cosas en nuestro corazón que solamente pueden quedar limpias si nosotros decidimos perdonar a los que nos han ofendido.

Somos perdonados por Dios por el rencor que hemos guardado en contra de nuestro prójimo, pero también tenemos que decidir perdonar a nuestro prójimo de corazón.

Si experimentamos el perdón de Dios, también tenemos que experimentar la dicha y la bendición de perdonar a los que nos han ofendido para que nuestro corazón quede limpio de resentimiento y rencores.

Deja un comentario