UNA PREGUNTA MUY IMPORTANTE

TEMA: UNA PREGUNTA MUY IMPORTANTE

TEXTO: ISAIAS 30:1-2 ¡Ay de los hijos que se apartan, dice Jehová, para tomar consejo, y no de mí; para cobijarse con cubierta, y no de mi espíritu, añadiendo pecado a pecado! 2 Que se apartan para descender a Egipto, y no han preguntado de mi boca; para fortalecerse con la fuerza de Faraón, y poner su esperanza en la sombra de Egipto.

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En este texto encontramos un reclamo o un reproche de parte de Dios para su pueblo que en el tiempo de dificultad estaban volviendo a Egipto para recibir ayuda, para sentirse protegido, PERO NO LE HABÍAN PEDIDO CONSEJO A ÉL, NI LE HABÍAN PREGUNTADO.

Lastimosamente muchos de nosotros en los momentos EN LOS CUALES NOS VA MAL EN LA VIDA nos desesperamos, nos desanimamos, y muchas veces nos apartamos, nos apartamos de los caminos de Dios, y todo eso por una razón: PORQUE NO NOS HACEMOS LA PREGUNTA CORRECTA, PORQUE NO NOS HEMOS HECHO LA PREGUNTA MÁS IMPORTANTE: ¿EN QUÉ ESTAMOS FALLANDO?.

HAY UN PEQUEÑO VERSÍCULO EN LA PALABRA DE DIOS EN EL CUAL SEGURAMENTE PODEMOS ENCONTRAR LA RESPUESTA A ESA PREGUNTA TAN IMPORTANTE: (Sofonías 3:1-2) ¡Ay de la ciudad rebelde y contaminada y opresora! 2 No escuchó la voz, ni recibió la corrección; no confió en Jehová, no se acercó a su Dios.

RESPONDAMOS POR MEDIO DE ESTE TEXTO ESTA PREGUNTA MUY IMPORTANTE: ¿Y EN QUÉ ESTAMOS FALLANDO?

I) FALLAMOS EN NO ESCUCHAR LA VOZ (VS 2ª) 2 NO ESCUCHÓ LA VOZ, ni recibió la corrección; no confió en Jehová, no se acercó a su Dios

Muchos de nosotros este año OÍMOS LA VOZ QUE NOS HABLABA, pero estuvimos tan ocupados, tan afanados, que NO ESCUCHAMOS LO QUE NOS DIJERON, no pusimos atención a la voz que nos hablaba.

NO ESCUCHAMOS LA VOZ DE DIOS: En todo lo que va del año nuestro Dios nos ha hablado de muchas formas: Por medio de la lectura Bíblica, por medio de un sermón, por medio de una alabanza, y por medio del Espíritu Santo en nuestro corazón.

LASTIMOSAMENTE ALGUNOS POR LA PROSPERIDAD Y EL ÉXITO NO ESCUCHARON LA VOZ DE DIOS pues su corazón estaba lleno de soberbia (Jeremías 22:21) Te he hablado en tus prosperidades, mas dijiste: No oiré. Este fue tu camino desde tu juventud, que nunca oíste mi voz.

ALGUNOS OTROS POR LA ESCASEZ Y LA ANGUSTIA NO ESCUCHARON LA VOZ DE DIOS porque su corazón estaba lleno de amargura y enojo (Éxodo 6:6-9) Por tanto, dirás a los hijos de Israel: Yo soy JEHOVÁ; y yo os sacaré de debajo de las tareas pesadas de Egipto, y os libraré de su servidumbre, y os redimiré con brazo extendido, y con juicios grandes; 7 y os tomaré por mi pueblo y seré vuestro Dios; y vosotros sabréis que yo soy Jehová vuestro Dios, que os sacó de debajo de las tareas pesadas de Egipto. 8 Y os meteré en la tierra por la cual alcé mi mano jurando que la daría a Abraham, a Isaac y a Jacob; y yo os la daré por heredad. Yo JEHOVÁ. 9 De esta manera habló Moisés a los hijos de Israel; pero ellos no escuchaban a Moisés a causa de la congoja de espíritu, y de la dura servidumbre.

NO ESCUCHAMOS LA VOZ DE NUESTRA FAMILIA: Nuestra familia nos habló durante todo el año, y nos hablaron de muchas formas, con palabra, con acciones y actitudes, pero lastimosamente muchos de nosotros no quisimos escuchar sus voces.

  • Nuestros hijos nos hablaron, quisieron platicar con nosotros, contarnos sus problemas, quisieron pedirnos un consejo, pero muchas veces el teléfono celular fue más importante para nosotros que sus palabras, la televisión, una película, un partido de futbol, siempre hubo algo que no nos dejó escuchar la voz de nuestros hijos.
  • Muchas veces nos hablaron con su rebeldía, con sus bajas calificaciones, con sus actitudes, pero no comprendimos que era su forma de pedirnos tiempo, de pedirnos nuestra atención.
  • Tus padres te hablaron, te quisieron aconsejar, te quisieron hacer saber que te aman, pero no quisiste escuchar, siempre preferiste tu música, tus redes sociales, tus juegos en línea, que sentarte a platicar con tus padres.
  • Nuestro cónyuge nos habló, muchas veces nos habló con palabras diciéndonos que nos amaba, preguntándonos qué nos pasaba, que nos sentía distantes, nos habló pidiéndonos que cambiáramos nuestra actitud, que mejoramos nuestra manera de comportarnos con él o con ella, pero no quisimos escuchar, SIEMPRE TUVIMOS UNA EXCUSA, SIEMPRE TUVIMOS UN REPROCHE, NUNCA RECONOCIMOS NUESTRO ERROR.
  • Muchas veces nos habló con su indiferencia, con su frialdad, muchas veces nos habló con su silencio, pero no tuvimos la sabiduría de reconocer, de escuchar la voz del corazón de nuestra pareja.

II) FALLAMOS EN NO RECIBIR LA CORRECCIÓN PARA NUESTRA VIDA (SOFONIAS 3:2b) No escuchó la voz, NI RECIBIÓ LA CORRECCIÓN; no confió en Jehová, no se acercó a su Dios.

Corrección significa: Modificación que se hace en una cosa o a una persona para corregir sus faltas, errores y defectos.

Eso significa que muchas veces Dios quiso ayudarnos a corregir nuestra vida, quiso intervenir en nuestra vida con su poder y su misericordia para ayudarnos a cambiar nuestra vida, pero nosotros no quisimos su corrección, decidimos seguir caminando en nuestro error, decidimos seguir en nuestros caminos equivocados, decidimos seguir viviendo en pecado, decidimos dejar la voluntad de Dios y hacer nuestra propia voluntad. (Jeremías 5:3) Oh Jehová, ¿no miran tus ojos a la verdad? Los azotaste, y no les dolió; los consumiste, y no quisieron recibir corrección; endurecieron sus rostros más que la piedra, no quisieron convertirse.

LASTIMOSAMENTE A MUCHOS CRISTIANOS SU SOBERBIA LOS HA VUELTO TAN AUTOSUFICIENTES QUE NO ACEPTAN CONSEJOS NI QUIEREN SER CORREGIDOS (Proverbios 26:12) ¿Has visto hombre sabio en su propia opinión? Más esperanza hay del necio que de él.

III) FALLAMOS EN NO CONFIAR EN DIOS Y ALEJARNOS DE EL (SOFONIAS 3.2c) No escuchó la voz, ni recibió la corrección; NO CONFIÓ EN JEHOVÁ, NO SE ACERCÓ A SU DIOS.

Que gran error el que muchos cristianos han cometido: TRATAR DE ENCONTRAR LA RESPUESTA PARA LOS PROBLEMAS DE SU VIDA ALEJÁNDOSE DE DIOS.

No nos dimos cuenta de que la respuesta a todos los problemas y dificultades no estaba lejos, siempre ha estado a disposición nuestra: LA RESPUESTA ES CRISTO, LEJOS DE ÉL NADA PODEMOS HACER. (Juan 15:5) Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.

PERO A PESAR DE TODO EN LO QUE HEMOS FALLADO HOY PODEMOS TOMAR LA MEJOR DECISIÓN PARA NUESTRA VIDA Y PARA NUESTRA FAMILIA: (Job 22:21) Vuelve ahora en amistad con él, y tendrás paz; Y por ello te vendrá bien.

NO ESPERES MÁS, VUELVE HOY MISMO AL CAMINO DE DIOS.

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