CINCO PROPÓSITOS DIVINOS EN NUESTRA AFLICCIÓN

TEMA: PROPOSITOS DIVINOS EN LA AFLICCION

TEXTO: JUAN 4:46-53

Según el diccionario se nos dice que un propósito es el fin o el objetivo que se pretende alcanzar, es decir que si decimos que nuestro Señor es un Dios de propósitos significa que él tiene un objetivo que quiere lograr con las distintas situaciones que el permite en nuestra vida-

Esta noche vamos a reflexionar en una historia muy preciosa por medio de la cual el apóstol Juan nos muestra la segunda señal, de las siete que encontramos en su evangelio, de la divinidad de nuestro Señor Jesucristo.

En esta historia de la sanidad realizada por nuestro Señor Jesucristo en el hijo de un noble, de un oficial del Rey, es decir de un hombre de rango elevado en la corte del rey Herodes, podemos encontrar algunos propósitos muy importantes que nuestro Señor Jesucristo quiere lograr en nuestra vida a través de nuestra aflicción.

  1. PRIMER PROPOSITO: HACERNOS VENIR A EL (VS 46-47 a)

 

  • El vs 46 comienza con un “Vino pues Jesús” pero ¿vendremos nosotros a él? Es una realidad que lastimosamente muchos somos indiferentes al Señor, nos olvidamos de él o llegamos a pensar que no lo necesitamos en nuestra vida.

 

  • ¿Sera que ese oficial del rey Herodes habría buscado a Jesús si su hijo no hubiera estado enfermo? Lo más seguro es que no, posiblemente ese hombre habría seguido siendo indiferente al Señor, pero la aflicción de tener a un hijo gravemente enfermo lo hizo venir a buscar a Jesús (Vs 47)

 

  • Tenemos que ser sabios y reconocer que Dios está con nosotros, pero él quiere que lo busquemos, tenemos que estar seguros de que uno de los propósitos principales de esa aflicción que hoy está afectando nuestra vida es que nosotros busquemos al Señor, pues como lo dice en el libro del profeta Amos: “Buscadme y viviréis”

 

  1. SEGUNDO PROPOSITO: DOBLEGAR NUESTRA SOBERBIA (VS47 b)

 

  • La palabra nos dice que el oficial del rey “Le rogo que descendiese y sanase a su hijo” y generalmente solo nos enfocamos en la acción de rogar, y decimos que ese hombre fue humilde cuando vino a Jesús, pero dejamos de lado la obra de Dios en él, es decir ¿Qué fue lo que hizo que ese hombre llegara a rogar a Jesús? ¡La aflicción de tener un hijo a punto de morir!

 

  • Seguramente ese hombre de alto rango en la corte del rey Herodes no estaba acostumbrado a rogar sino a ordenar y a mandar, posiblemente su corazón era soberbio o lleno de orgullo, pero por medio de la aflicción el Señor doblego su corazón, lo hizo ser humilde y rogar al Señor por la sanidad de su hijo.

 

  • En nuestra vida tenemos que saber que el Señor sabe cómo doblegar nuestra soberbia, como doblegar nuestro orgullo y nuestra vanidad, y cuando nos ha hablado por medio de su palabra y no hemos querido ser humildes a su voz, el Señor permite la aflicción, el Señor sabe cuál es la “tuerca más sensible” que tiene que apretar en nuestra vida para que humillemos nuestro corazón, pues él quiere ayudarnos, pero tenemos que saber que él no puede ayudarnos cuando nuestro corazón está lleno de soberbia pues el: Atiende al humilde y mira de lejos al altivo.
  • TERCER PROPOSITO: QUE CREAMOS EN EL (VS 48)

 

  • El Señor quiere que tengamos fe en él, y para que creamos en obra en nuestra vida señales y prodigios.

 

  • Dios permite la aflicción para obrar milagros en nuestra vida, para que podamos ver su gloria, para que podamos ver sus maravillas, y creamos en él.

 

  • Para que las personas que no son salvas lo reciban como Señor y salvador de su vida

 

  • Para que los que ya son salvos sean fortalecidos en su fe al ver que las maravillas de Dios son reales.

 

  • Tenemos que estar seguros de que EL TIEMPO DE LOS MILAGROS NO HA TERMINADO, el Señor sigue haciendo señales y prodigios para que las personas crean en él.

 

  1. CUARTO PROPOSITO: QUE APRENDAMOS A CREER Y A OBEDECER SU PALABRA (VS 49-50)

 

  • Podemos notar que el oficial del rey estaba acostumbrado a dar órdenes y que le obedecieran a él, vemos en el vs 49 que le llamo Señor, pero él quería que Jesús hiciera lo que él le decía, que fuera con él a su casa a sanar a su hijo.

 

  • Jesús no fue con él, sino que le dijo: Ve, tu hijo vive, ese hombre tenía que confiar en las palabras de Jesús y obedecer, tenía que hacer el viaje de regreso a su casa en Capernaun desde Cana, lo cual eran casi 30 Kms. es decir, dos días de camino.

 

  • Pero cuando llego a su casa se dio cuenta que su fe y su obediencia en la palabra del Señor habían dado fruto de bendición pues su hijo estaba sano (vs 51)

 

  • Cuantos de nosotros somos exactamente igual que el oficial del rey, pues le llamamos Señor, pero queremos que el obedezca lo que nosotros le decimos.

 

  • El Señor nos dice ve y cree, quizás nosotros digamos: Señor yo quería, pero Señor a mí me gustaría, Señor yo decía… pero Dios nos dice esta noche: CREE Y OBEDECE.

 

  • En las aflicciones de nuestra vida el Señor quiere que creamos en su palabra y le obedezcamos, que reconozcamos que la última palabra la tiene el en nuestra vida.

 

  1. QUINTO PROPOSITO: LA SALVACION DE NUESTRA FAMILIA (VS 52-53)

 

  • Ellos eran una familia que no habían creído en Jesús, pero por medio de la aflicción creyeron en el todos los de la casa del oficial del rey.

 

  • Posiblemente en tu familia hay varias personas que aún no han querido creer en Jesús, pero tenemos que orar para que por medio de la aflicción que Dios ha permitido que llegue a tu casa también llegue la salvación para cada uno de ellos.

2 comentarios sobre “CINCO PROPÓSITOS DIVINOS EN NUESTRA AFLICCIÓN

  1. Mi hno q Diios te siga bendiciendo mas cada dia y dandote sabuduria para seguir bendiciendo y edificando nuestras vidas a través de estos preciosos bosquejos. Muchas gracias

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