ZARANDEADOS COMO TRIGO

TEMA: ZARANDEADOS COMO TRIGO

TEXTO: LUCAS 22:31-32

Nuestro Señor Jesucristo le advirtió a Pedro que satanás lo había pedido a él para zarandearlo como trigo.

El trigo era necesario zarandearlo para separar el grano de trigo de las impurezas, para que sea un grano fructífero.

Pero ¿Por qué nuestro Señor Jesucristo permitió que satanás zarandeara a Pedro como se zarandea el trigo? Porque nuestro Señor Jesucristo sabía que Pedro necesitaba ser zarandeado.

• Porque, aunque satanás estaba pensando en destruir a Pedro, nuestro Señor tenía pensamientos de bien para el (Jeremías 29:11)

 

• Porque a los que le aman al final todas las cosas le ayudaran a bien (Romanos 8:29)

En nuestra vida igualmente Dios permite que seamos zarandeados como trigo porque lo necesitamos, porque tenemos cosas muy arraigadas en nuestra vida que no las podemos dejar solamente siendo zarandeados como el trigo al igual que el apóstol Pedro.

1. DIOS PERMITE QUE SEAMOS ZARANDEADOS COMO TRIGO PARA QUITAR DE NUESTRA VIDA LAS MALAS AMISTADES (SALMOS 88:18)

 

• Una frase dice que los tiempos difíciles revelan a los verdaderos amigos, y cuando somos zarandeados por el enemigo, ya sea por la zaranda llamada pobreza, o la zaranda llamada enfermedad, Dios se encarga de apartar de nosotros a las personas que son dañinas para nuestra vida y no nos dejan avanzar ni fructificar en nuestra vida cristiana.

 

• Cuando somos zarandeados el Señor nos liberta de relaciones pecaminosas que destruyen nuestra familia.

 

1. DIOS PERMITE QUE SEAMOS ZARANDEADOS PARA QUITAR DE NOSOTROS LA SOBERBIA (SALMOS 19:13)

 

• El Señor nos llama a cada uno de nosotros a ser mansos y humildes como el, pero muchas veces la soberbia está muy arraigada en nuestro corazón y no podemos quitarla de nuestro corazón por nosotros mismos.

 

• Es por eso por lo que el Señor le permite a satanás que nos zarandee, para doblegar nuestro orgullo, para doblegar nuestro corazón soberbio.

 

• Es bueno ser humillado para corregir nuestra vida (Salmo 119:67)

 

• DIOS PERMITE QUE SEAMOS ZARANDEADOS PARA QUITAR DE NOSOTROS LA INCREDULIDAD (JOB 42:5)

 

• Muchos cristianos tenemos una relación con Dios de oídas como lo dijo Job, hemos oído que Dios tiene poder, hemos oído que Dios es sanador, hemos oído que Dios es proveedor, pero oírlo y creerlo son dos cosas distintas.

 

• Tenemos corazón duro y por más que oímos la incredulidad esta nuestro corazón, por eso el Señor nos permite que satanás nos haga pasar por la zaranda de las pruebas para que podamos ver su poder en nuestra vida, para que podamos ver sus maravillas y creamos.

 

• El Señor permite que el diablo nos zarandee para sacarnos de nuestra incredulidad (Marcos 9:20-24)