PERDÓNANOS NUESTRAS DEUDAS

TEMA: PERDÓNANOS NUESTRAS DEUDAS

TEXTO: MATEO 6:12

INTRODUCCIÓN

Esta noche vamos a reflexionar en la palabra de Dios sobre aquellas deudas que necesitamos que Dios nos perdone, que necesitamos que el Señor las borre, pero no son deudas económicas, sino que son deudas espirituales, son los pecados con los cuales hemos ofendido a nuestro Dios.

Todos sabemos que perdonar una deuda significa no cobrarla, es decir ya no exigir el pago sino declararla cancelada, y este día el Señor ponía en mi corazón meditar en esas famosas facturas de las que siempre hablamos, esas facturas que Dios nos cobra como consecuencia de nuestros pecados y de nuestras iniquidades, pero ¿te has dado cuenta que en el caso de muchos cristianos parecería que Dios no les cobra la factura de las consecuencias de sus errores? pero hay otros cristianos a los cuales parecería que Dios les está cobrando acá en este mundo antes de llevárselos a su presencia hasta el último pecado que cometieron en su vida,  ¿Por qué es eso así?

Podemos ver en el versículo que hemos leído que el Señor nos enseñó a orar pidiendo que esas facturas sean perdonadas, es decir que ya el pago no sea exigido. ¿Le has pedido a Dios alguna vez eso en oración? Normalmente no lo hacemos, solo pedimos perdón por el pecado que cometimos pero no le pedimos a Dios que la deuda no sea cobrada en nuestra vida, no le pedimos a Dios que esas famosas facturitas sean selladas de cancelado y el pago ya no se exija más.

Pero esta noche quiero enfocarme principalmente en la segunda parte del versículo: “como también nosotros perdonamos a nuestros deudores….”  Es decir que nosotros debemos pedir que Dios declare canceladas nuestras deudas al igual como nosotros declaramos canceladas las deudas que nuestros prójimos tienen con nosotros, y eso se llama PERDONAR.

Yo puedo pedir a Dios que cancele mi factura cuando yo también he cancelado por medio del perdón la factura de mi prójimo en mi corazón (Lucas 11:4)

Podemos sacar entonces una conclusión espiritual y doctrinal muy importante esta noche por medio de la palabra de Dios: En gran medida las facturas que Dios por medio de la vida nos cobra se deben a nuestra falta de perdón, al rencor que guardamos en nuestros corazones, ya que si nosotros queremos cobrar lo que nos deben los que nos han ofendido también el Señor nos cobra la factura a nosotros como lo vemos en la parábola de los dos deudores (Mateo 18:23-35)

Podemos ver a un hombre que le fue perdonada una deuda impagable de diez mil talentos pero luego el no tuvo la misericordia de perdonar al que apenas le debía cien denarios y notemos lo que nos dicen los versículos (34-35) Le puso en la cárcel hasta que pagara todo lo que debía y nos enseña que así hará nuestro Padre Celestial con nosotros si no perdonamos de todo corazón.

Valdría la pena que esta noche cada uno de nosotros reflexionemos como esta nuestra vida, nuestra salud, nuestras finanzas, nuestra familia, pues posiblemente muchas de las situaciones que estamos sufriendo pueden ser por causa de negarnos a perdonar a nuestros deudores, por mantener vivas esas facturas de cosas que nos hicieron en el pasado nuestros padres, nuestros hermanos, nuestra pareja, etc. Quizás queremos cobrarlas por el rencor que hay en nuestro corazón y queremos ver el mal en nuestro prójimo, queremos verlos fracasar, queremos ver que sufran así como ellos nos hicieron sufrir a nosotros y no nos damos cuenta que al no cancelar esa deuda Dios nos está cobrando a nosotros nuestra deuda.

Nuestro Señor Jesucristo dejo bien claro que para que nuestras facturas sean declaradas canceladas nosotros debemos declarar canceladas las de nuestros prójimos, esto muchas veces no queremos escucharlo o no queremos reconocerlo pero es una verdad Bíblica y espiritual (Mateo 6:14-15 / Marcos 11:25-26)

Quizás algunos de nosotros estemos pensando: Pero ¿Cuánto debo perdonar? y podemos ver en la Biblia que el apóstol Pedro le pregunto algo similar al Señor (Mateo 18:21-22) Jesús le dijo hasta setenta veces siete, es decir siempre, tenemos que perdonar siempre sin medida.

Que tenemos que hacer entonces con esas facturas pendientes de nuestros prójimos que tenemos guardadas en el corazón?

  • Primeramente arrepentirnos y pedir perdón a nuestro Dios porque nuestra falta de perdón es una ofensa contra el (Isaías 1:18)

 

  • Segundo, debemos declarar canceladas las deudas de nuestros prójimos que hemos acumulado en el corazón (Colosenses 3:13)

 

  • Tercero, experimenta la paz y el gozo que viene como bendición de Dios por el perdón (Salmo 51:12)

 

 

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