TEMA: CONSEJOS BÍBLICOS PARA QUE NOS VAYA BIEN COMO FAMILIA
TEXTO: DEUTERONOMIO 4:40 Y guarda sus estatutos y sus mandamientos, los cuales yo te mando hoy, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, y prolongues tus días sobre la tierra que Jehová tu Dios te da para siempre.
DESCARGA GRATIS EN PDF: https://elblogdelpastoroscarflores.com/wp-content/uploads/2025/04/CONSEJOS-BIBLICOS-PARA-QUE-NOS-VAYA-BIEN-COMO-FAMILIA-1.pdf
Seguramente todos hemos escuchado consejos y opiniones sobre lo que tenemos que hacer para que nos vaya bien, de manera individual y como familia.
Esos consejos y opiniones tienen que ver con la preparación académica, estudiar en el extranjero, ahorrar, invertir, tener un buen empleo, emprender un negocio propio, etc.
Pero este día vamos a reflexionar sobre los consejos que nos da la palabra de Dios para que nos vaya bien a nosotros y a nuestra familia.
VEAMOS CUALES SON ESOS CONSEJOS PARA QUE NOS VAYA BIEN COMO FAMILIA:
I) PRIMER CONSEJO: SER OBEDIENTES A LA PALABRA DE DIOS Y SU VOLUNTAD
(DEUTERONOMIO 4:40) Y guarda sus estatutos y sus mandamientos, los cuales yo te mando hoy, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, y prolongues tus días sobre la tierra que Jehová tu Dios te da para siempre.
Para obedecer se necesita primeramente ser humildes,
- Para reconocer que los planes de Dios son mejores que los nuestros.
- Para aceptar que Dios siempre tiene la razón.
- Para doblegar nuestra voluntad a la de Dios.
Hacer las cosas conforme a la palabra de Dios es nuestra garantía para que nos vaya bien en la vida y para que vivamos bajo la cobertura y respaldo de nuestro Dios (Josue 1:8) Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.
II) SEGUNDO CONSEJO: HONRAR A NUESTROS PADRES Y A NUESTRAS MADRES
(EFESIOS 6:2-3) Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; 3 para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.
Verdaderamente todos queremos que nos vaya bien en la vida, que tengamos salud, que tengamos una larga vida, pero lastimosamente se nos olvida que de la forma como tratamos hoy a nuestros padres dependerá en gran manera nuestro futuro.
Cada uno de nosotros tenemos que enseñar a nuestros hijos a honrarnos como sus padres, pero ¿cómo podemos hacer eso? Pimeramente con nuestro ejemplo, dando honra a nuestros padres, a ambos, a nuestro padre y también nuestra madre, pues lastimosamente muchas veces por los errores que alguno de ellos han cometido en su vida pensamos que no son dignos de que los honremos, pero no es así, debemos honrarlos no porque lo merezcan sino primeramente porque es un mandato de nuestro Dios.
Muchos cristianos quieren tener un futuro lleno de bendición, paz y prosperidad, pero están maltratando a su padre y a su madre, los estan humillando, o tratandolos con violencia y menosprecio, y muchos de ellos llegan hasta maldecir la vida de sus padres, y la palabra de Dios nos declara que eso traerá tinieblas a su vida (Proverbios 20:20) Al que maldice a su padre o a su madre, Se le apagará su lámpara en oscuridad tenebrosa.
La palabra de Dios nos muestra lo grave que es delante de Dios ser un hijo o una hija que no honra a sus padres, ser un hijo o una hija que trata con menosprecio y violencia a sus padres:
Proverbios 19:26 (Traducción Lenguaje Actual) No hay hijo más malo ni más sinvergüenza que el que roba a su padre y echa a la calle a su madre.
Entonces ¿Cómo es la forma que la palabra de Dios nos enseña con la cual debemos honrar a nuestros padres y a nuestras madres?
No menospreciarlos nunca (Proverbios 23:22) Oye a tu padre, a aquel que te engendró; Y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies.
Buscar la forma de recompensarlos en vida en agradecimiento por lo que ellos hicieron por nosotros (1 Timoteo 5:4) Pero si alguna viuda tiene hijos, o nietos, aprendan estos primero a ser piadosos para con su propia familia, y a recompensar a sus padres; porque esto es lo bueno y agradable delante de Dios.
Pero ¿Qué nos dice la palabra de Dios con aquellos padres o madres de familia que no fueron buenos, que nos abandonaron, o que nos maltrataron?
¿Cómo podemos tener la capacidad de honrarlos a pesar de todo? (Lucas 6:37) No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.
«Perdonar no es justificar lo injustificable; es decidir no cargar más con lo que solo Dios puede juzgar.»
«Jesús no nos pide que neguemos el daño, sino que dejemos el juicio en Sus manos y abramos espacio al perdón.»
III) TERCER CONSEJO: HACER LO BUENO Y LO RECTO EN NUESTRA VIDA
(DEUTERONOMIO 12:28) Guarda y escucha todas estas palabras que yo te mando, para que haciendo lo bueno y lo recto ante los ojos de Jehová tu Dios, te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti para siempre.
Este texto nos muestra una verdad espiritual muy importante: Para que nos vaya bien en la vida no basta con solamente hacer lo bueno, sino también tenemos que hacer lo recto, es decir, lo justo y con honradez.
Lastimosamente la mayoría de las personas se conforman con hacer lo bueno, pero se olvidan que nosotros como cristianos tenemos que procurar reflejar siempre el carácter de Dios en nuestras acciones (Salmos 25:8) Bueno y recto es Jehová; Por tanto, él enseñará a los pecadores el camino.
Para comprender mejor lo que significa hacer lo bueno y lo recto podemos decir que:
Es bueno que un constructor edifique una casa muy bonita pero lo recto sería que haya utilizado los materiales adecuados, sin sobreprecio, cobrando lo justo.
Es bueno que un mecánico repare bien un vehículo, pero lo recto es que no haya usado repuestos en mal estado o de mala calidad con tal de ganar más dinero.
Es bueno que una mujer tenga lo necesario para mantener a sus hijos y que no les falte nada, pero lo recto es que no lo haga por medio de una relación de adulterio.
Es bueno que tengamos prosperidad y que en nuestra familia no le falta nada, pero lo recto es que no se haga por medio de engaños, corrupción o negocios ilícitos.
Podemos darnos cuenta que lo bueno y lo recto son palabras inseparables, no basta con solamente procurar hacer lo bueno, tenemos que procurar también hacer siempre lo recto, lo justo y obrar con honradez.
¿POR QUÉ VALE LA PENA HACER LO BUENO Y LO RECTO?
PORQUE ES MEJOR EL BUEN NOMBRE (Proverbios 22:1) De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, Y la buena fama más que la plata y el oro. El buen nombre y la buena fama no solamente nos abre puertas de bendición a nuestra vida, sino que también LAS MANTIENE ABIERTAS, y eso traerá bendiciones y respeto hacia nuestra vida.
PORQUE DIOS ESCUDRIÑA EL CORAZÓN (Romanos 8:27) Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos. No podemos engañar al Señor, y delante de sus ojos nada puede ocultarse, él sabe si lo que estamos haciendo es solamente bueno, o si secretamente estamos obrando sin rectitud, sin justicia, y sin honradez.
PORQUE TODO TARDE O TEMPRANO SALE A LA LUZ (Marcos 4:22) Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz. Hacer lo bueno y lo recto delante de los ojos del Señor nos ayuda a vivir en paz, sin temor, sin la angustia de ser descubiertos, no hay nada mejor que vivir una vida en la cual podamos ir a cualquier lugar con la frente en alto, sabiendo que el Señor conoce nuestros caminos y nuestro corazón.
CONCLUSIÓN: todos queremos lo mejor para nuestra familia, pero la verdadera prosperidad no comienza con las cuentas del banco, sino con la obediencia al corazón de Dios. Si queremos que nos vaya bien, si deseamos una vida bendecida para nosotros y para nuestros hijos, debemos decidir vivir conforme a Su palabra. Obedecerle, honrar a nuestros padres aun cuando sea difícil, y caminar con integridad delante de Dios es el camino seguro hacia Su favor. Recordemos: lo bueno no siempre es suficiente, necesitamos lo recto, lo justo, lo que agrada al Señor. Que nuestra familia prospere no solo en lo material, sino también en lo espiritual, moral y eterno. ¡El Señor promete que nos irá bien si seguimos Su consejo!
Descubre más desde EL BLOG DEL PASTOR OSCAR FLORES
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

