QUITANDO EL VELO DEL CORAZÓN

TEMA: QUITANDO EL VELO DEL CORAZÓN

TEXTO: 2 CORINTIOS 3:12-16 Así que, teniendo tal esperanza, usamos de mucha franqueza; 13 y no como Moisés, que ponía un velo sobre su rostro, para que los hijos de Israel no fijaran la vista en el fin de aquello que había de ser abolido. 14 Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque hasta el día de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual por Cristo es quitado. 15 Y aun hasta el día de hoy, cuando se lee a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos. 16 Pero cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará. 17 Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.

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Posiblemente muchos de nosotros cuando vemos la vida de aquellas personas que dicen conocer a Dios y que dicen tener una religión pero sus acciones reflejan totalmente lo contrario nos preguntamos: ¿POR QUÉ RECHAZAN AL SEÑOR? ¿POR QUÉ VIVEN ENREDADOS EN VICIOS Y PECADOS QUE LOS DESTRUYEN? ¿POR QUÉ NO ENTIENDEN LA VERDAD DE DIOS?

Y el texto que hemos leído nos enseña una verdad espiritual muy importante para poder responder esas preguntas: (Vs 14-15) Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque hasta el día de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual por Cristo es quitado. 15 Y aun hasta el día de hoy, cuando se lee a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos. 16 Pero cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará.

RESPONDAMOS LAS PREGUNTAS QUE HICIMOS ANTERIORMENTE:

I) LA PRIMERA RESPUESTA ES PORQUE EL ENTENDIMIENTO DE ELLOS ESTÁ EMBOTADO

(Vs 14) Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque hasta el día de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual por Cristo es quitado.

La palabra «SE EMBOTÓ» describe el estado de los israelitas que, al leer el Antiguo Testamento, no podían entender plenamente las Escrituras debido a la «COBERTURA» de sus corazones. Este endurecimiento les impedía ver cómo las Escrituras apuntaban hacia Cristo, es por eso que no lo reconocieron y no le creyeron.

La palabra EMBOTAR en el original es la palabra griega EPOROTHE, la cual significa: Endurecer, hacer insensible, Cubrir con una capa dura, como piedra o callo. Cegar o entorpecer mentalmente.

Es decir es una condición espiritual en la que el corazón o LA MENTE SE VUELVE INSENSIBLE o incapaz de percibir las cosas de Dios.

Esta insensibilidad espiritual es la que hace que las personas a pesar de tener una religión, a pesar de decir que creen en Dios, VIVEN ENREDADOS Y ESCLAVIZADOS EN VICIOS, EN ADICCIONES, EN ESTILOS DE VIDA DESTRUCTIVOS, pues su corazón tiene un callo, está endurecido e insensible y no les permite reconocer la esclavitud que hay en sus vidas a causa del pecado (Efesios 4:18-19) teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón; 19 los cuales, después que perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de impureza.

II) LA SEGUNDA RESPUESTA ES PORQUE TIENEN UN VELO EN EL CORAZÓN QUE NO LES DEJA RECONOCER LA VERDAD DE DIOS

(2 CORINTIOS 3:15) Y aun hasta el día de hoy, cuando se lee a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos.

En este pasaje, Pablo se refiere a los israelitas que, al leer el Antiguo Testamento no pudieron comprender que las Escrituras apuntan a Cristo como el cumplimiento de la Ley y los Profetas. EL «VELO» SIMBOLIZA UN OBSTÁCULO ESPIRITUAL, UNA CEGUERA QUE LES IMPIDE RECONOCER LA VERDAD DE LA OBRA REDENTORA DE CRISTO.

Así como los israelitas no reconocieron a Cristo al leer las Escrituras, muchas personas hoy en día tienen un «velo» espiritual que les impide aceptar la verdad de Dios y les impide reconocer su verdadera condición espiritual

(Juan 3:18) El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.

(1 Corintios 6:9-10) ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, 10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.

ESTE VELO PUEDE MANIFESTARSE DE VARIAS MANERAS:

SE MANIFIESTA EN CREENCIAS CONTRARIAS A LA VERDAD DEL SEÑOR: Muchas personas rechazan la verdad de Dios porque están atrapadas en un sistema de creencias contrario a la fe en Cristo. Es decir, tradiciones religiosas que están basadas en las obras humanas en lugar de la gracia de Dios. (Colosenses 2:8) Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.

SE MANIFIESTA POR EL ORGULLO Y LA AUTOSUFICIENCIA  ya que las personas no ven su necesidad de un Salvador. Confían en su propia justicia, sabiduría o recursos, creyendo que no necesitan a Dios (Romanos 1:21-22) Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. 22 Profesando ser sabios, se hicieron necios,

SE MANIFIESTA EN AMAR LAS COSAS DEL MUNDO Y RECHAZAR AL SEÑOR  En la actualidad, muchas personas están tan ocupadas con los placeres y distracciones del mundo, que las prefieren por sobre el amor y la salvación que el Señor les ofrece (Juan 3:19) Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.

III) SOLAMENTE CRISTO PUEDE QUITAR ESE VELO, SOLAMENTE LA VERDAD DE DIOS LES PUEDE DAR LIBERTAD

(2 CORINTIOS 3:16-17) Pero cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará. 17 Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.

Esto significa que NINGUNA CEGUERA ESPIRITUAL ES PERMANENTE, ya que Dios tiene el poder de abrir los ojos de los incrédulos a través del Espíritu Santo

La palabra de Dios nos enseña que ESTE ENDURECIMIENTO PUEDE SER QUITADO cuando una persona se vuelve a Cristo.

Uno de los grandes propósitos del plan redentor de nuestro Señor es DARLE VISTA A LOS QUE ESTÁN CIEGOS ESPIRITUALMENTE (Lucas 4:18) El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos;

Solamente nuestro Dios puede quitar de nosotros el corazón endurecido, EL CORAZÓN DE PIEDRA, insensible, soberbio, autosuficiente, y darnos un CORAZÓN NUEVO que reconozca con humildad su necesidad de Dios y de recibir la salvación del Señor (Ezequiel 36:26) Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne.

HOY DIOS QUIERE QUITAR DE TU VIDA PARA SIEMPRE EL VELO DE TU CORAZÓN PARA QUE PUEDAS CONTEMPLAR Y EXPERIMENTAR LAS MARAVILLAS DE DIOS EN TU VIDA (2 Corintios 3:18) Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.

Y como iglesia ¿CÓMO PODEMOS AYUDAR A TODOS AQUELLOS QUE TIENEN UN VELO EN SU CORAZÓN? 

Orar por las personas que rechazan la verdad: Pedir que Dios quite el «velo» y les dé un corazón abierto para recibir el evangelio.

Predicar con amor y paciencia: Reconocer que el entendimiento espiritual es una obra del Espíritu Santo, no de argumentos humanos.

Vivir como testimonio de la verdad de Cristo: Cuando las personas ven la paz y la transformación en nuestras vidas, esto puede ser un reflejo que las motive a buscar a Dios.

CONCLUSIÓN: Este pasaje de 2 Corintios 3:12-16 nos recuerda que solo Cristo tiene el poder de quitar el velo que oscurece nuestros corazones y nos impide ver la verdad de Dios. Muchas personas, atrapadas en la ignorancia espiritual y en el endurecimiento de sus corazones, no pueden experimentar la libertad y transformación que Dios ofrece. Pero la buena noticia es que, a través de la conversión a Cristo, ese velo puede ser levantado. Cuando nos volvemos a Él con humildad y arrepentimiento, Él nos da un nuevo corazón, un corazón sensible a Su voz y a Su verdad. Hoy es el día para que ese velo sea quitado y podamos ver claramente la gloria del Señor, siendo transformados por Su Espíritu. ¡No hay ceguera espiritual permanente cuando nos rendimos a Cristo!