TEMA: LOS VERSÍCULOS MÁS TRISTES DE LA BIBLIA
TEXTO: 2 CORINTIOS 7:10 Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.
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Una historia triste seguramente nos puede hacer llorar porque nos conmueve el corazón, porque nos produce lástima y tristeza en nuestro interior.
Pero este día no vamos a hablar de historias tristes, sino de versículos que producen tristeza en nuestra vida, no por la historia que cuentan sino porque reflejan nuestra propia vida y la forma como estamos viviéndola, No es mi intención ni la del Señor entristecer a nadie o hacerlo llorar, sino llamarnos al arrepentimiento, que nuestro corazón sea tocado por el poder de Dios para salvar a los que aún no son creyentes y para hacer reaccionar a todos aquellos que nos hemos alejado de Dios o estamos viviendo vidas desagradables para el.
Tal como nos lo dice el versículo la tristeza que es según Dios, o que es producida por Dios produce arrepentimiento, un cambio de vida, volver a hacer lo que agrada al Señor.
VEAMOS ESTE DIA CUALES SON ESOS VERSÍCULOS MÁS TRISTES DE LA BIBLIA
I) PRIMER VERSÍCULO : CUANDO LE COLMAMOS LA PACIENCIA A DIOS (2 CRÓNICAS 36:15-16) Y Jehová el Dios de sus padres envió constantemente palabra a ellos por medio de sus mensajeros, porque él tenía misericordia de su pueblo y de su habitación. 16 Mas ellos hacían escarnio de los mensajeros de Dios, y menospreciaban sus palabras, burlándose de sus profetas, hasta que subió la ira de Jehová contra su pueblo, y no hubo ya remedio.
El reino de judá es decir el reino del sur en Israel tuvo muchos reyes malvados, idólatras, rebeldes y Dios mandö sus profetas Jeremías, Isaías, y otros más para llamarlos al arrepentimiento, para llamarlos a volver al camino de Dios pues él tenía misericordia de su pueblo.
Pero su pueblo y sus reyes en lugar de arrepentirse, en lugar de aceptar la reprensión del Señor menospreciaron y se burlaron de sus profetas, una y otra vez el Señor los busco y les habló, pero ellos no quisieron obedecer la palabra de Dios, hasta que le colmaron la paciencia al Señor, hasta que la ira de Dios fue derramada sobre su pueblo… y no hubo ya remedio (Vs 16) Mas ellos hacían escarnio de los mensajeros de Dios, y menospreciaban sus palabras, burlándose de sus profetas, hasta que subió la ira de Jehová contra su pueblo, y no hubo ya remedio
TRASLADEMOS ESTE VERSÍCULO A NUESTRA VIDA: ¿cuántos de nosotros estaremos con la misma actitud del reino de judá?, sabiendo que hay cosas en nuestra vida que al Señor no le agradan pero no queremos atender su palabra. El Señor ha tratado de hacernos entender por medio de su palabra, por medio de un sermón, por medio de los consejos de nuestros padres, pero no quisimos entender, le colmamos la paciencia a Dios y ahora ya no hay remedio. (Proverbios 29:1) El hombre que reprendido endurece la cerviz,
De repente será quebrantado, y no habrá para él medicina.
QUE TENEMOS QUE HACER : (Oseas 14:1) Vuelve, oh Israel, a Jehová tu Dios; porque por tu pecado has caído. / (Oseas 14;4) Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos. Cuando se nos dice que no hay remedio y que no habrá medicina no significa que no hay esperanza para nosotros, sino que SOLAMENTE NUESTRO DIOS NOS PUEDE AYUDAR.
II) SEGUNDO VERSÍCULO: DONDE ESTAN TUS AMIGOS (JEREMÍAS 52:3-9) Y a causa de la ira de Jehová contra Jerusalén y Judá, llegó a echarlos de su presencia. Y se rebeló Sedequías contra el rey de Babilonia. 4 Aconteció, por tanto, a los nueve años de su reinado, en el mes décimo, a los diez días del mes, que vino Nabucodonosor rey de Babilonia, él y todo su ejército, contra Jerusalén, y acamparon contra ella, y de todas partes edificaron contra ella baluartes. 5 Y estuvo sitiada la ciudad hasta el undécimo año del rey Sedequías. 6 En el mes cuarto, a los nueve días del mes, prevaleció el hambre en la ciudad, hasta no haber pan para el pueblo. 7 Y fue abierta una brecha en el muro de la ciudad, y todos los hombres de guerra huyeron, y salieron de la ciudad de noche por el camino de la puerta entre los dos muros que había cerca del jardín del rey, y se fueron por el camino del Arabá, estando aún los caldeos junto a la ciudad alrededor. 8 Y el ejército de los caldeos siguió al rey, y alcanzaron a Sedequías en los llanos de Jericó; y lo abandonó todo su ejército. 9 Entonces prendieron al rey, y le hicieron venir al rey de Babilonia, a Ribla en tierra de Hamat, donde pronunció sentencia contra él.
Tal como lo dijimos en el punto anterior por su soberbia y su idolatría el reino de Judá fue sitiado y conquistado por el rey Nabucodonosor, el rey de Judá en ese momento era el rey Sedequías, y en el momento que se abrió la brecha en el muro de la ciudad, en el momento que el ejército babilonio entró en Jerusalén el rey trató de huir.
Y qué tristes las palabras que nos mencionan el VS 8: LO ABANDONÓ TODO SU EJÉRCITO, aquellos que le prometieron fidelidad hasta la muerte, aquellos que estaban para estar con él en los momentos más duros, le dieron la espalda, lo abandonaron.
¿A cuántos de nosotros nos ha sucedido exactamente lo mismo que al rey Sedequías? todos aquellos en quien confiábamos, en los momentos más duros de nuestra vida nos abandonaron, no quisieron ayudarnos, se fueron con la promesa de volver y nunca volvieron, se fueron con la promesa de venir por nosotros y nunca cumplieron, prometieron estar con nosotros y no fue así.
Pero todo esto Dios lo permite para que pudiéramos comprender que el único verdadero amigo es nuestro dios (Isaías 46:3-5) Oídme, oh casa de Jacob, y todo el resto de la casa de Israel, los que sois traídos por mí desde el vientre, los que sois llevados desde la matriz. 4 Y hasta la vejez yo mismo, y hasta las canas os soportaré yo; yo hice, yo llevaré, yo soportaré y guardaré.5 ¿A quién me asemejáis, y me igualáis, y me comparáis, para que seamos semejantes?
Solamente nuestro Dios es el amigo que nunca falla, el que siempre está , en quien siempre podemos confiar, a pesar de cuantos nos hayan fallado, de cuantos nos hayan dado la espalda, Dios siempre estará ahí para nosotros,
III) TERCER VERSÍCULO: NO RECONOCISTE QUE EL SEÑOR TE BUSCABA (LUCAS 19:41-44) Y cuando llegó cerca de la ciudad, al verla, lloró sobre ella, 42 diciendo: ¡Oh, si también tú conocieses, a lo menos en este tu día, lo que es para tu paz! Mas ahora está encubierto de tus ojos. 43 Porque vendrán días sobre ti, cuando tus enemigos te rodearán con vallado, y te sitiarán, y por todas partes te estrecharán, 44 y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación.
Jesús lloró sobre la ciudad de Jerusalén, viendo en el futuro lo que venía sobre ella por no haber reconocido a su Mesías, por no haber comprendido el tiempo de la visitación de Dios para con ellos.
Dios estaba buscando a su pueblo por medio del verbo hecho hombre, pero el pueblo por su religiosidad por su legalismo, por su pecado, no lo reconoció, lo rechazaron y lo mataron.
Verdaderamente es duro rechazar a Dios, pero son más duras las consecuencias de hacerlo. Muchos al igual que el pueblo de Israel no hemos reconocido, o no queremos aceptar que Dios esta buscandonos, que Dios está llamándonos, no queremos reconocer que Dios tiene un plan para nuestra vida.
Queremos seguir en nuestro mundo, en nuestro pecado, a pesar de todo lo que Dios ha permitido en nuestra vida para empujarnos a él, no hemos querido doblegar nuestra vida al señor
¿que tenemos que hacer ? (Isaías 55:6-7) Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. 7 Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. DÉJATE ENCONTRAR POR EL SEÑOR
IV) CUARTO VERSÍCULO: EL VERSÍCULO MAS TRISTE, LLEGAR AL FINAL DE NUESTRA VIDA SIN SER SALVOS (JEREMÍAS 8:20) Pasó la siega, terminó el verano, y nosotros no hemos sido salvos.
Muchos piensan que siempre habrá otra oportunidad, pensamos que mañana podremos hacerlo, pero quizás para algunos ya no habrá un mañana.
Ya paso tu niñez, pasó tu adolescencia y tu juventud, has llegado a tu edad adulta y quizás a la vejez y aun no has querido recibir en tu vida la salvación del Señor,
HOY DIOS TE RECUERDA: (2 Corintios 6:2) Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, Y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.
INVITA HOY A CRISTO A TU VIDA!!
