BOSQUEJO CORTO: UNA DECISIÓN DE LIBERTAD

TEXTO: DECISION DE LIBERTAD

TEXTO: HECHOS 8:17-23

Muchas personas hoy en día ya no están presas o esclavas en vicios o adulterios, ni pornografía, para muchas personas su esclavitud es el RENCOR Y LA AMARGURA.

Muchos cristianos estamos en la misma condición de Simón en la historia que hemos leído, pensamos que las bendiciones del Espíritu Santo de Dios las podemos obtener por dinero, por lo material, pensamos que vamos a agradar a Dios solo por el dinero que ofrendamos o por el servicio que damos en la iglesia, o por las cosas que hacemos.

Simón tenía un problema en su corazón, pues no era recto para con Dios, en su corazón había hiel de amargura y estaba en prisiones de maldad.

Hiel es algo amargo producido por el hígado, pero también simboliza el resentimiento o un sentimiento de inmensa pena.

Dios quiere hacernos libres del rencor y de la amargura que hay en nuestro corazón porque un corazón lleno de amargura y rencor es un corazón triste.

La palabra de Dios nos describe perfectamente el corazón de muchos cristianos que estamos como Simon en una cárcel de rencor y de amargura

  • Secos en nuestro interior (Proverbios 17:22)

 

  • Solamente uno mismo conoce la amargura que está viviendo (Proverbios 14:10)

 

  • Nuestra vida está llena de rencillas (Proverbios 10:12)

 

  • Nuestra boca no puede alabar sino solo quejarse (Job 10:1)

 

  • Contaminamos a otros y herimos a otros (Hebreos 12:15)

 

TENEMOS QUE COMPRENDER ALGO MUY IMPORTANTE

Nuestro Dios nos dios vida a nosotros que estábamos muertos en pecados por medio del perdón (Colosenses 2:13)

Pero la única forma de poder disfrutar de esa vida que Cristo nos ha dado, una vida de gozo, de paz, de amor, es que nosotros hagamos lo mismo que el hizo por nosotros (Efesios 4:32)

PARA SER LIBRES TENEMOS QUE TOMAR UNA DECISION: En nuestra vida tenemos dos puertas que puedes elegir  LA PUERTE DE LA MUERTE que es elegir seguir odiando, seguir con resentimiento, seguir con rencor en el corazón o elegir LA PUERTA DE LA VIDA, y esa puerta de la vida ES EL PERDON (Deuteronomio 30:15/Jeremias 21:8)  ESA PUERTA ES JESUS MISMO (JUAN 10:9)

Deja un comentario