BOSQUEJO DE FAMILIA: UNA FAMILIA RICA

TEMA: UNA FAMILIA RICA

TEXTO: SALMO 37:16

INTRODUCCION

Le invito que pueda pensar en este momento en las familias más ricas de su país, pues siempre hay familias que se conocen en la sociedad por sus negocios, por sus posesiones, etc. ¿Pondría usted su familia en esa lista? Seguramente la mayoría de nosotros no lo haríamos pues consideramos que nuestra familia es pobre o de humilde condición, o que no tiene las riquezas que esas familias de empresarios tienen.

La realidad es que la gran mayoría de nosotros no nos damos cuenta las riquezas que tenemos en nuestra familia, no las reconocemos y lastimosamente no las agradecemos.

Esta mañana vamos a meditar en la palabra de Dios en aquellas riquezas que como familias cristianas tenemos, y nos vamos a dar cuenta que somos familias ricas, pero no a la manera del mundo, sino a la manera de Dios.

PRIMERAMENTE, QUISIERA QUE MEDITÁRAMOS UN MOMENTO EN ESTA PEQUEÑA HISTORIA:

Una vez un padre de una familia acaudalada que vivía en un muy confortable departamento de una gran ciudad, llevó a su hijo de viaje por el campo, con el firme propósito de que viera cuán pobre y necesitada era la gente del campo, a fin de que comprendiera el valor de las cosas y lo afortunados que era ellos.

Así estuvieron por espacio de un día y una noche completos viviendo en la granja de una familia campesina muy humilde.

Al concluir el viaje y de regreso a casa, el padre le pregunto a su hijo: ”¿Que te pareció el viaje?”

” Muy lindo Papá!”  respondió el hijo.

” Viste que tan pobre y necesitada puede ser la gente, y ¿qué aprendiste?”

”Vi que nosotros tenemos un perro en casa, ellos tienen cuatro. Nosotros tenemos una piscina de 25 metros, ellos tienen un río que no tiene fin. Nosotros tenemos lámparas importadas en el patio ellos tienen las estrellas. Nuestro patio llega hasta el borde de la casa, el de ellos tiene todo el horizonte. Especialmente Papá vi que ellos tienen tiempo para conversar trabajar y compartir en familia. Tú y mamá tienen que trabajar todo el tiempo y casi nunca los veo y rara vez conversan conmigo, o conversamos los tres.”

Al terminar el relato, el padre se quedó mudo, mientras su hijo agregaba:

” Gracias Papá por enseñarme lo ricos que nosotros podríamos llegar a ser.”

Ese niño de la historia pudo darse cuenta de las riquezas que la familia pobre y humilde tenían, y reconoció que ellos eran solamente ricos económicamente, pero que eran pobres en muchas otras áreas.

Quizás muchos de nosotros no reconocemos las grandes riquezas que tenemos en nuestra familia y por eso quizás vivimos tristes, o vivimos sin agradecimiento, pues la mayoría solamente medimos la riqueza a nivel material y económico.

Hoy vamos a reconocer en nuestra familia las riquezas que tenemos, vamos a darnos cuenta de que somos familias ricas, vamos a darnos cuenta que cada uno de nosotros tiene mucho que agradecer a Dios por sus bendiciones hacia nuestra familia.

Veamos por medio de la palabra de Dios cuáles son esas riquezas:

  1. LA RIQUEZA DE SER UNA FAMILIA CRISTIANA (SALMO 20:1-2)

 

  • Ser una familia cristiana es más que una riqueza una bendición, una familia cristiana es aquella que no solamente van juntos a la misma iglesia, una verdadera familia cristiana es la que en el corazón de cada uno de sus miembros Cristo es el Rey y Señor.

 

  • La riqueza de ser una familia cristiana es porque como nos lo dicen los versículos que hemos leído:

 

  1. Tenemos a quien acudir cuando las cosas en nuestra vida se ponen difíciles (vs1a) Nuestro Dios nos oye y nos ayuda, no es indiferente.

 

  1. Tenemos quien nos defienda (vs 1b) El es Jehová de los ejércitos, ese es su nombre, nuestras batallas son sus batallas y su victoria es nuestra victoria, cualquiera que sean nuestros adversarios, nosotros sabemos que Dios esta por nosotros (Salmo 56:9)

 

  1. Tenemos una iglesia donde nos instruyen con la palabra de Dios para mantenernos firmes en la vida (Salmo 20:2) como familia cristiana hemos reconocido que la iglesia es un elemento indispensable en nuestra vida, es el lugar donde nos encontramos con Dios, donde recibimos la palabra que nos instruye y nos da fortaleza para seguir adelante en la vida

 

  1. LA RIQUEZA DE VIVIR EN ARMONIA (SALMO 133:1)

 

  • Tenemos que comprender que la bendición no es solamente vivir juntos, pues muchas familias por necesidad o por otros motivos tienen que vivir juntos bajo en mismo techo, pero no viven en armonía, muchas veces las familias viven juntas, pero como enemigos (Miqueas 7:6)
  • Ese versículo puede describir con seguridad la forma de vida de muchas familias ricas económicamente, pero pobres en amor, pobres en respeto.

 

  • Es una riqueza poder vivir juntos, pero en armonía, poder vivir en paz, en tranquilidad, sin pleitos, sin violencia, sin tener que cuidarse de lo que el otro miembro de la familia pueda hacer o decir, SIN EGOISMO compartiendo lo que tenemos, disfrutando de las bendiciones que Cristo nos da.

 

  • Pero tenemos que comprender que la armonía familiar es una bendición de Dios cuando procuramos que nuestros caminos sean agradables a el (Proverbios 16:7)

 

  • LA RIQUEZA DEL AMOR (PROVERBIOS 15:7)

 

  • Verdaderamente que no hay mejor alimento para el alma que el amor, porque de que sirve comer los mejores y más caros manjares, cuando lo estamos comiendo con personas que nos hacen sentir que su corazón está lejos de nosotros (Proverbios 23:7)

 

  • Que duro es estar sentado a la mesa con alguien que sabemos que dice amarnos, pero nos es infiel, que dice amarnos, pero nos lastima con sus palabras y con sus acciones, que dice amarnos, pero nos daña con golpes o con maltratos.

 

  • Cuando hay amor entre la familia hay paz, y esa paz hace que todo se disfrute mejor (Proverbios 17:1)

 

  • El amor nos permite aceptarnos tal como somos, el amor nos permite pasar por alto la ofensa, nos permite soportar las debilidades de nuestra familia (Proverbios 10:12)

 

  1. LA RIQUEZA DE LA FE (SANTIAGO 2:5)

 

  • La fe es un tesoro, pues el dinero puede comprar muchas cosas, con el dinero se pueden hacer muchas cosas, pero HAY ALGO QUE EL DINERO NO PUEDE HACER: LO IMPOSIBLE.

 

  • Por eso la fe es una riqueza maravillosa, porque por medio de la fe podemos hacer que las cosas imposibles sean posibles (Marcos 9:23)

 

  • Que maravillo que nuestro Señor Jesucristo no dice: SI puedes pagar, sino si puedes creer.

 

  • Por la fe estamos seguros de que en nuestra familia nada faltara (Filipenses 4:19) SOMOS RICOS POR LAS RIQUEZAS DE NUESTRO DIOS.

 

 

 

 

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