LOS PELIGROS DE LA DUREZA DE CORAZÓN

TEMA: LOS PELIGROS DE LA DUREZA DE CORAZÓN

TEXTO: SALMO 81:10-16 Yo soy Jehová tu Dios, Que te hice subir de la tierra de Egipto; Abre tu boca, y yo la llenaré. 11 Pero mi pueblo no oyó mi voz, E Israel no me quiso a mí. 12 Los dejé, por tanto, a la dureza de su corazón; Caminaron en sus propios consejos. 13 ¡Oh, si me hubiera oído mi pueblo, Si en mis caminos hubiera andado Israel! 14 En un omento habría yo derribado a sus enemigos, Y vuelto mi mano contra sus adversarios. 15 Los que aborrecen a Jehová se le habrían sometido, Y el tiempo de ellos sería para siempre. 16 Les sustentaría Dios con lo mejor del trigo, Y con miel de la peña les saciaría.

DESCARGA EN PDF: https://elblogdelpastoroscarflores.com/wp-content/uploads/2023/05/LOS-PELIGROS-DE-LA-DUREZA-DE-CORAZON.pdf

En la palabra de Dios encontramos en muchos texto que uno de los peligros más grandes para un cristianos es cuando su corazón se endurece para con Dios, pues lastimosamente la dureza de nuestro corazón trae quebrantamiento a nuestra vida.

Es por eso que es necesario reconocer, hacer un diagnóstico de nuestro corazón para reconocer esa dureza para con Dios, ¿CUÁLES SON LAS CARACTERÍSTICAS DE UN CORAZÓN ENDURECIDO PARA CON DIOS? (Marcos 8:17-18) Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Qué discutís, porque no tenéis pan? ¿No entendéis ni comprendéis? ¿Aún tenéis endurecido vuestro corazón? 18 ¿Teniendo ojos no veis, y teniendo oídos no oís? ¿Y no recordáis?.

En este texto podemos encontrar TRES CARACTERÍSTICAS DEL CORAZÓN ENDURECIDO: NO MIRA , NO OYE Y NO RECUERDA

  • NO MIRA, es decir, no reconoce la bondad de Dios para con él y no ve las bendiciones que el Señor ha traído a su vida, por lo tanto un corazón duro NO TIENE AGRADECIMIENTO PARA CON DIOS.
  • NO OYE, no quiere escuchar la voz de Dios, no quiere ser corregido, no oye el llamado de Dios a su vida, por lo tanto un corazón duro NO QUIERE SER CORREGIDO.
  • NO RECUERDA, se le olvida de donde el Señor lo rescato, no recuerda el dolor, la amargura, la destrucción que sus malos caminos produjeron en su vida, y en su familia, y por eso quiere volver a esos caminos equivocados, podemos decir entonces que un corazón duro ES UN CORAZÓN NECIO.

Ahora que ya reconocimos cuales son las características de un corazón endurecido veamos en el texto que leímos para comenzar cuáles son LOS PELIGROS DE UN CORAZÓN ENDURECIDO:

I) PRIMER PELIGRO: MENOSPRECIAR Y RECHAZAR AL SEÑOR (SALMO 81:10-11) Yo soy Jehová tu Dios, Que te hice subir de la tierra de Egipto; Abre tu boca, y yo la llenaré. 11 Pero mi pueblo no oyó mi voz, E Israel no me quiso a mí.

Es verdaderamente triste lo que nos declara este texto, llegar a tener un corazón tan endurecido que menospreciamos y rechazamos al único que verdaderamente tiene todo lo que nuestra vida necesita, a nuestro Dios.

Lastimosamente un corazón endurecido es un corazón tan engañado por la soberbia que nos hace creer que estamos en una posición que nos permite ver de menos la ayuda de Dios, y no reconocemos que en realidad NO SOMOS NADA SIN EL SEÑOR (Apocalipsis 3:17) Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.

II) SEGUNDO PELIGRO: ALEJARNOS DEL SEÑOR (SALMO 81:12) Los dejé, por tanto, a la dureza de su corazón; Caminaron en sus propios consejos.

El corazón duro nos hace creer que aun lejos de Dios nos irá bien, que podemos alejarnos de los caminos de Dios y ser victoriosos, que podemos alejarnos del Señor y ser bendecidos, pero nuestro Señor Jesucristo nos ha dejado claro que eso no es así, al que se aparta del Señor, AL QUE SE ALEJA DE DIOS NO LE VA BIEN (Juan 15:5) Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.

Cuando nuestro corazón se endurece el Señor nos deja, para que podamos darnos cuenta por nosotros mismos que estar lejos de Dios algo MALO Y AMARGO para nuestra vida (Jeremías 2:19) Tu maldad te castigará, y tus rebeldías te condenarán; sabe, pues, y ve cuán malo y amargo es el haber dejado tú a Jehová tu Dios, y faltar mi temor en ti, dice el Señor, Jehová de los ejércitos.

III) TERCER PELIGRO: DEJAR DE DISFRUTAR DE LAS BENDICIONES Y DEL RESPALDO DE DIOS EN NUESTRA VIDA (SALMO 81:13-16) ¡Oh, si me hubiera oído mi pueblo, Si en mis caminos hubiera andado Israel! 14 En un momento habría yo derribado a sus enemigos, Y vuelto mi mano contra sus adversarios. 15 Los que aborrecen a Jehová se le habrían sometido, Y el tiempo de ellos sería para siempre. 16 Les sustentaría Dios con lo mejor del trigo, Y con miel de la peña les saciaría.

Por la dureza de nuestro corazón es que peleamos las batallas de nuestra vida en nuestra fuerza, en nuestra capacidad limitada, y por eso el Señor este dia nos dice : (Vs 13-14) Oh, si me hubiera oído mi pueblo, Si en mis caminos hubiera andado Israel! 14 En un momento habría yo derribado a sus enemigos, Y vuelto mi mano contra sus adversarios. SEAMOS HUMILDES, Y ACERQUÉMONOS A ÉL , PERMITAMOS QUE SEA DIOS QUIEN PELEE CON NOSOTROS Y POR NOSOTROS LAS BATALLAS DE LA VIDA.

Por la dureza de nuestro corazón es que estamos viviendo en escasez, en amargura, SIN QUERER RECONOCER QUE LO BUENO QUE EL MUNDO OFRECE JAMAS SE PUEDE COMPARAR CON LO MEJOR QUE DIOS NOS DA : SU PRESENCIA, SU AMOR, SU PAZ, SU RESPALDO, SU BENDICIÓN. (Salmos 16:11) Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; Delicias a tu diestra para siempre.

CONCLUSIÓN ¿CÓMO PODEMOS QUITAR LA DUREZA DE NUESTRO CORAZÓN PARA CON DIOS? Tenemos que reconocer nuestro error de habernos alejado de Dios y volver hoy a ÉL con un corazón VERDADERAMENTE arrepentido (Lucas 15:17-21) Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! 18 Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. 19 Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros.

Deja un comentario