LOS MANDAMIENTOS DE UNA FAMILIA CRISTIANA , II PARTE

TEMA: LOS MANDAMIENTOS DE UNA FAMILIA CRISTIANA , II PARTE 

TEXTO: EXODO 20:14-17 14 

Este día continuaremos aplicando los mandamientos dados por nuestro Dios al pueblo de Israel por medio de Moises para aplicarlos a la familia cristiana como un modelo de vida para una familia que quiere agradar a Dios: 

VI) CUIDÉMONOS DE LA INFIDELIDAD MATRIMONIAL (ÉXODO 20:14) 

El adulterio es la relación sexual entre una persona casada con otra persona que no es su cónyuge, es decir el adulterio es una infidelidad en el matrimonio.

Tenemos que reconocer que el adulterio es algo que destruye o que afecta gravemente la relación matrimonial, a pesar de que muchas veces la infidelidad sea tomada a la ligera en la sociedad pues se considera que “Es lo normal” o es algo que “Todos  hacen” tenemos que saber que para nuestro Dios la infidelidad matrimonial es algo que él no aprueba bajo ninguna circunstancia.

Y es importante comprender que el adulterio no solamente tiene que ver con las relaciones sexuales a nivel fisico, sino tambien lo que en la actualidad se conoce como relaciones “virtuales” el cual es una relación enfocada primeramente en la mente y en el corazon (Mateo 5:28) 

Y como familia tenemos que comprender que la fidelidad en nuestras relaciones de pareja son valores que debemos enseñar a nuestro hijos e hijas desde el noviazgo.

VII) NO HURTARAS: TENEMOS QUE ENSEÑAR EN NUESTRA FAMILIA LA IMPORTANCIA DE LA HONRADEZ. (EXODO 20:15) 

Definamos primeramente qué es la honradez: la honradez tiene que ver con la verdad y la integridad de nuestras acciones, es hacer lo justo y verdadero, respetando el derecho y la propiedad de nuestro prójimo.

En una sociedad como la que vivimos donde se le da tanta importancia la apariencia, donde las personas son juzgadas por lo que tienen no por lo que son, en una sociedad donde lastimosamente la forma de valorar a alguien es bajo la filosofía de “tanto tienes tanto vales”, es de suma importancia enseñar a nuestros hijos a vivir con honradez cueste lo que nos cueste.

Pues en la actualidad muchas personas viven bajo el principio de “el fin justifica los medios”, es decir , que si quieres algo en la vida no importa como lo obtengas, lo importante es que lo obtengas, y es por eso que podemos ver en la sociedad que muchas personas recurren a formas ilegales, deshonestas y engañosas para obtener lo que por medios legítimos no pueden tener.

Pero nosotros como cristianos no debemos vivir bajo ese estilo de vida pues la palabra de Dios nos muestra que ese tipo de riquezas de nada sirven, no trae provecho a la vida (Proverbios 10:2)

En nuestra familia debemos enseñar la bendición del trabajo honrado (1 Tesalonicenses 4:11-12) 

Tenemos que comprender que la honradez muchas veces no produce grandes riquezas materiales , pero sí produce algo que es de más estima que todas las riquezas:  (Proverbios 22:1) UN BUEN NOMBRE.

VIII) NO HABLARÁS CONTRA TU PRÓJIMO FALSO TESTIMONIO: NO PRACTIQUEMOS LA MENTIRA EN LA FAMILIA (ÉXODO 20:16) 

Tenemos que saber que nuestras palabras tienen el poder de edificar y también por medio de una mentira se puede destruir a una persona, un hogar, un negocio o la reputación de alguien 

Es lamentable que la sociedad en la que vivimos, la mentira se haya convertido prácticamente en un estilo de vida; pues muchas personas están tan acostumbradas a mentir que dicen mentiras incluso cuando no tienen necesidad de hacerlo. 

Pero ¿cuál es el problema con la mentira? Tenemos que comprender que una mentira nos libra de una invitación indeseada, de hablar con otra persona a la que no queremos hablarle, de asistir al trabajo un día, puede ayudarnos a hacer un buen negocio, PERO AL FINAL DESTRUIRÁ LA CONFIANZA y se llega a un punto en el que nuestra palabra ya no vale nada. 

Es por eso que la palabra de Dios nos llama a dejar las mentiras y hablar verdad con nuestro prójimo (Efesios 4:25) Y basado en este texto en nuestra familia no debemos fomentar :

  • Los chismes (Proverbios 20:19) Un chisme es un comentario o noticia no verificada que circula entre la gente, generalmente de carácter negativo.
  • Los juicios a la ligera (Mateo 7:1.3) Es una evaluación apresurada que hacemos sobre alguien basada en información limitada que se tiene a la mano.
  •  La difamación (1 Corintios 4:13) es una evaluación apresurada o basada en información limitada que se tiene a la mano

IX) NO CODICIARÁS : TENGAMOS UN CORAZÓN CONTENTO Y AGRADECIDO (EXODO 20;17) 

Codiciar significa desear mucho o en exceso una cosa difícil de alcanzar, en especial dinero, poder o cualquier cosa para mejorar la situación personal.

La codicia nos lleva a tener un corazón  lleno de envidia y no nos permite ser felices ni disfrutar las bendiciones que el Señor nos da en la familia (Proverbios 14:30) 

El Señor en su palabra nos hace un llamado a dejar de codiciar y de envidiar y tener agradecimiento y contentamiento en nuestro corazón (Hebreos 13:5) 

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