MANUAL DEL CRISTIANO ANGUSTIADO

TEMA: MANUAL DEL CRISTIANO ANGUSTIADO

 

TEXTO: SALMOS 11:3

DESCARGA EN PDF: MANUAL DEL CRISTIANO ANGUSTIADO

Las angustias vienen a nuestra vida, algunas pudimos haberlas evitado tomando mejores decisiones, otras no, son inevitables.

 

Pero la pregunta clave es ¿Que debemos hacer? La respuesta la encontramos como siempre en la palabra de nuestro Dios.

 

I) NO DEBEMOS SOBREDIMENSIONAR NUESTROS PROBLEMAS (1 SAMUEL 17:26)

 

Muchas veces caemos no solamente en angustia sino en desesperación porque sobre dimensionamos los problemas, los vemos más grandes de lo que realmente son.

 

Si vemos a David, no llamo a Goliat gigante, ni enorme, él vio a Goliat cómo un enemigo que podía ser vencido.

 

¿Cómo podemos nosotros hacer eso? Tenemos que ver los problemas en la perspectiva de Dios no de la nuestra (Jeremías 20:11) seguramente nuestros problemas para nosotros son muy grandes, pero ¿que tan grandes son en realidad si los comparamos con nuestro Dios?

 

FRASE: Saber dimensionar el verdadero tamaño de nuestros problemas ya es parte de la solución

 

No hay problema, por grande que puede que puede parecer para nosotros, que sea mas grande o más poderoso que nuestro Dios.

 

II) NO PENSEMOS QUE ESE PROBLEMA NO TIENE SOLUCIÓN (SALMO 107:15-16)

 

Muchas veces nos sentimos angustiados y desesperados porque vemos que en nuestros problemas todas las puertas se nos han cerrado, no vemos salidas, nos sentimos atrapados en nuestros problemas.

 

Si te sientes que todas las puertas se han cerrado el Señor te recuerda hoy que hay una puerta que siempre se abrirá para nosotros, y es la puerta de la misericordia de Dios (Mateo 7:8)
Nunca tenemos que pensar que no hay ninguna salida para nuestra problema, porque aunque no haya, nuestro Dios tiene poder para abrir camino para nosotros donde no hay, para hacer maravillas donde parece que todo está perdido, y aun en nuestro desierto él nos sorprenderá, no tenemos que limitar a Dios pensando que solo hay una forma de resolver nuestro problema (Isaías 41:18 / Isaías 43:19)

 

III) NO HAGAMOS LOCURAS, TRAIGAMOS NUESTRAS CARGAS AL SEÑOR (MATEO 11:28)

 

Muchas veces en medio de nuestros problemas en los cuales nos sentimos desesperados y angustiados somos tentados por el enemigo a hacer locuras que son peores que nuestros problemas, a tomar decisiones equivocadas.

 

Muchas personas se sienten tan agobiadas y desamparadas por los problemas que llegan a querer quitarse la vida, pero en realidad esas personas no quieren quitarse la vida lo que quieren quitarse es el dolor, la angustia, el temor, que sus aflicciones le están causando.

 

La solución no es buscar la manera de huir de los problemas, sino traerlos al Señor, para él no hay una carga tan grande que lo pueda agobiar, para él no hay problema que no tenga solución, tenemos que traer nuestras ansiedades y angustias en las manos de nuestro Dios (1 Pedro 5:7)

 

IV) POR SOBRE TODO, PONGÁMONOS A CUENTAS CON DIOS (ISAIAS 1:18)

 

Hay un problema que ninguna persona en el mundo puede resolver, y es el problema más urgente que debemos resolver: NUESTRA VIDA ETERNA.

 

Toda deuda se puede pagar, todo problema se puede resolver, toda enfermedad puede sanar, pero nadie puede salvarse a sí mismo, necesitamos estar a cuenta con Dios para ser salvo.

 

Quizás Dios ha permitido esta angustia en nuestra vida para que AL FIN nos entreguemos a él .

Deja un comentario