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SERMÓN DE AÑO NUEVO: ¿EN QUE FALLAMOS EN EL 2017?

TEMA: ¿EN QUE FALLAMOS EN EL 2017?

TEXTO: SOFONIAS 3:1-2

En la actualidad cuando un vehículo tiene una falla en su funcionamiento en el tablero de indicadores se enciende la señal “Check Engine” y eso es un aviso que nos indica que algo esta funcionando mal, que es necesario llevarlo al taller y que por medio de un scanner nos digan que está fallando en el vehículo.

En nuestra vida nosotros también tenemos señales que nos indican que algo no está bien, que algo esta fallando, que hay un problema en nuestra vida, y ese indicador son las situaciones que vivimos, las consecuencias de nuestras acciones, los resultados de nuestras decisiones.

Es por eso por lo que este primer domingo del año vamos a permitir que el scanner de Dios que es la Biblia nos diga que esta fallando en nuestra vida, que fue lo que hizo que en el 2017 no hubiera paz en nuestro hogar, que viviéramos en escases, que en nuestra familia siempre hubiera pleitos, que no hubiera gozo en nuestro corazón.

Veamos en la palabra de Dios ¿En qué fallamos en el 2017?

  1. FALLAMOS EN NO ESCUCHAR LA VOZ (VS 2ª)

 

 

 

Algunos por la prosperidad y el éxito no escucharon la voz de Dios pues su corazón estaba lleno de soberbia (Jeremías 22:21)

 

Algunos otros por la escases y la angustia no escucharon la voz de Dios porque su corazón estaba lleno de amargura y enojo (Éxodo 6:6-9)

 

 

Nuestros hijos nos hablaron, quisieron platicar con nosotros, contarnos sus problemas, quisieron pedirnos un consejo, pero muchas veces el teléfono celular fue más importante para nosotros que sus palabras, la televisión, una película, un partido de futbol, siempre hubo algo que no nos dejó escuchar la voz de nuestros hijos.

 

Muchas veces nos hablaron con su rebeldía, con sus bajas calificaciones, con sus actitudes, pero no comprendimos que era su forma de pedirnos tiempo, de pedirnos nuestra atención.

 

Tus padres te hablaron, te quisieron aconsejar, te quisieron hacer saber que te aman, pero no quisiste escuchar, siempre preferiste tu música, tus redes sociales, tus juegos en línea, que sentarte a platicar con tus padres.

 

Nuestro cónyuge nos habló, muchas veces nos habló con palabras diciéndonos que nos amaba, preguntándonos que nos pasaba, que nos sentía distantes, nos habló pidiéndonos que cambiáramos nuestra actitud, que mejoráramos nuestra manera de comportarnos con el o con ella, pero no quisimos escuchar, siempre tuvimos una excusa, siempre tuvimos un reproche, nunca reconocimos nuestro error.

 

Muchas veces nos hablo con su indiferencia, con su frialdad, muchas veces nos hablo con su silencio, pero no tuvimos la sabiduría de reconocer, de escuchar la voz del corazón de nuestra pareja.

 

  1. FALLAMOS EN NO RECIBIR LA CORRECCION PARA NUESTRA VIDA (SOFONIAS 3:2b)

 

 

 

 

 

 

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